La Cámara de Diputados convirtió en ley la implementación de la Patente Única del Mercosur, que comenzará a regir obligatoriamente a partir del 1º de enero de 2016 para vehículos nuevos, transporte de pasajeros y de carga y motovehículos.
La nueva chapa será de color blanco de fondo con caracteres en negro, incluirá la bandera de cada país y tendrán siete caracteres alfanuméricos en relieve.
En la sesión especial efectuada ayer la Cámara baja aprobó sin debate el proyecto que avanza en la consolidación de la integración regional alcanzada entre Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Venezuela a través de la garantía de la libre circulación de vehículos.
La iniciativa fue impulsada originalmente por el Poder Ejecutivo desde el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos.
En un comunicado del Ministerio de Justicia, el viceministro Julián Alvarez destacó que «la patente única es un símbolo de la integración alcanzada entre los países latinoamericanos».
También subrayó que la nueva patente permitirá «el avance en la lucha contra los delitos de robo de vehículos, la trata de personas y el narcotráfico, dado que facilita el intercambio de información sobre datos del propietario, identificación de patente, características del vehículo e informe de robo o hurto».
Por su parte, el subsecretario de Coordinación y Control de Gestión Distrital, Esteban De Gracia, indicó que en la Argentina «la nueva chapa admitirá 450 millones de combinaciones alfanuméricas simultáneas y tendrá efecto sobre el parque automotor del Mercosur conformado por unos 110 millones de vehículos».
De Gracia aseguró que las medidas de seguridad de la nueva patente «son óptimas».
Los primeros pasos hacia su establecimiento de la Patente Única se dieron en 2010 cuando el Consejo del Mercosur creó el proyecto y dispuso un sistema de intercambio de información sobre los vehículos entre los Estados miembros.