Aunque las mujeres en el medio rural español representan el 48% de la población y cuentan con una mayor preparación que los hombres, están infrarrepresentadas en organizaciones políticas, sociales y sindicales. El 15 de octubre se conmemoró el Día Internacional de las Mujeres Rurales, una jornada impulsada por la ONU para reconocer la función y contribución decisivas de la población femenina en el campo.
En España, esa mayor preparación femenina en el ámbito rural se concreta, según datos del Gobierno, en que el porcentaje de tituladas con estudios superiores es mayor, un 11,9% frente al 8,4% de los varones. No obstante, se percibe una importante brecha en las organizaciones profesionales agrarias y en los consejos rectores de cooperativas agrarias.
Según las Naciones Unidas, que impulsó la jornada en 2008, las mujeres rurales dependen en su mayoría de los recursos naturales y la agricultura para subsistir, y representan una cuarta parte del conjunto de la población mundial.
En los países en desarrollo, las mujeres rurales suponen aproximadamente el 43% de la mano de obra agrícola y producen, procesan y preparan gran parte de los alimentos disponibles, por lo que sobre ellas recae la gran responsabilidad de la seguridad alimentaria.
Teniendo en cuenta que el 76% de la población que vive en la extrema pobreza se encuentra en zonas rurales, garantizar el acceso de las mujeres rurales a recursos agrícolas productivos empodera a las mujeres y contribuye a reducir el hambre y la pobreza en el mundo, añade la ONU en su web oficial.
Por ello, la jornada de este 15 de octubre busca reconocer la función y contribución decisivas de la mujer rural, incluida la mujer indígena, en la promoción del desarrollo agrícola y rural, la mejora de la seguridad alimentaria y la erradicación de la pobreza rural.