Los All Blacks aplastaron al equipo europeo, le marcó nueve tries y se impuso 62-13; el próximo sábado jugará ante los Springboks en Twickenham.
Con una paliza que quedará en la historia, los All Blacks consiguieron su boleto a la semifinal del Mundial ante Francia. Fue una goleada sin atenuantes, una paliza de Nueva Zelanda que se impuso 62-13 para quedar entre los cuatro mejores del Mundial, donde ya lo espera Sudáfrica.
Fueron sólo los hombres de negro los que estuvieron en la cancha. Dominaron de principio a fin a un Francia que llegaba con la ilusión de poder hacerle frente con una historia que los avalaba. Aquella victoria de Les Bleus en 2007 asomaba en el horizonte, pero Nueva Zelanda no les permitió ni soñar: apoyó nueve tries y selló una goleada que quedará en la historia.
Los All Blacks le metieron cuatro tries en el primer tiempo y cinco en el segundo a un Francia que por escasos minutos trató de imponer su juego, sin éxito. Los tries los marcaron Savea (3), Kerr-Barlow (2), Retallick, Milner-Skudder, Kaino y Read. Además Dan Carter consiguió siete conversiones y un penal.
El próximo sábado a las 12, en el estadio de Twickenham, los All Blacks se medirán con Sudáfrica, la primera semifinal de este Mundial. Los campeones del mundo buscarán revalidar el título que consiguieron hace cuatro años. A este paso, nadie parece hacerles frente.