«Tuvimos indicios concretos de que alguien quería detonar un explosivo en el estadio», dijo el jefe de policía Volker Kluwe en declaraciones a la agencia de noticias DPA.
Unidades de élite de la policía alemana llegaron al estadio y acordonaron una amplia zona en torno a la cancha donde desplegaron cintas que alertan sobre «peligro de muerte», luego de suspenderse el partido entre Alemania y Holanda.
Policías fuertemente armados acordonaron una extensa área en torno al estadio Arena HDI. Alrededor a la zona de evacuación fueron desplegadas bandas rojas y blancas con la inscripción «Cuidado – Peligro de muerte», informó la agencia de noticias DPA.