El mundo esta en vilo por el terror yihadista, que ha encontrado con los ataques simultáneos en París su punto más alto. Sin embargo, no se trató del primero ni del último ataque y tanto el Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés) como Al Qaeda han prometido seguir golpeando en Occidente.
En los últimos 40 días, ha habido más de 663 muertos, sumados desde los atentados suicidas de ISIS en Ankara, la capital de Turquía, al del viernes 20 en Bamako, Mali, con al menos 27 fallecidos, cometido por grupos afines a Al Qaeda.
A continuación, un listado con los más sangrientos atentados yihadistas de los últimos 40 días:
10 de octubre: 128 personas murieron en un doble atentado suicida en Ankara, la capital turca, durante una marcha por la paz convocada con la consigna, «Paz, trabajo y democracia». El episodio, que es el peor de este tipo en la historia de Turquía, ocurrió pocos días antes de las elecciones y dejó planteado un clima de terror que finalmente favoreció al presidente Recep Erdogan. Pese a que el grupo no se lo atribuyó hasta el momento, todas las investigaciones apuntan la responsabilidad a ISIS.
16 de octubre: 22 muertos en un atentado cometido simultáneamente por cuatro mujeres suicidas en Maiduguri, Nigeria, donde el día anterior habían perdido la vida 26 personas por una doble explosión. El país se encuentra bajo el fuego permanente de Boko Haram, una organización yihadista local que juró lealtad al Estado Islámico y que realiza ataques usualmente bajo el modo de mujeres bomba. Desde entonces y hasta la fecha, cometieron tres ataques más con un saldo de 58 muertos. En total, son 96 muertos en atentados de Boko Haram en los últimos 40 días.
31 de octubre: se trata del peor siniestro aéreo de la historia de Rusia. Un Airbus A-321 de la compañía MetroJet con 224 personas a bordo, que volaba de la localidad turística egipcia de Sharm el Sheij a San Petersburgo, estalló en la península del Sinaí poco después de despegar por una bomba de 1,5 kilogramos de trilita. El Estado Islámico se atribuyó la autoría el 18 de noviembre, pese a que en un primer momento tanto Rusia como Egipto lo negaron. La última semana, sin embargo, Rusia admitió que había indicios de que la explosión había surgido desde adentro del avión, posiblemente por la detonación de un explosivo por parte de un yihadista a bordo.
1 de noviembre: 13 muertos en un doble atentado del grupo yihadista Al Shabab –filial de Al Qaeda en Somalia– contra el hotel Sahafi en la capital, Mogadisco. Dos meses antes habían cometido otro ataque contra una base militar con un saldo de 50 muetos.
12 de noviembre: un doble atentado suicida, que se atribuye el Estado Islámico, causó al menos 43 muertos en el sur de Beirut, Líbano, feudo de Hezbollah. Los yihadistas, que pertenecen a la rama sunita del islam, se oponen al grupo libanés, de tendencia chiita.
13 de noviembre: ISIS reivindica una cadena de siete atentados simultáneos en París –los más sangrientos en la historia de Francia– contra las inmediaciones del estadio de fútbol Saint-Denis, varios restaurantes y una sala de concierto, que causaron 132 muertos y dejaron a la capital conmocionada y en estado de excepción por temor a más ataques.
20 de noviembre: los grupos Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI) Y Al Murabitun reivindican un ataque conjunto contra un hotel en la capital malí, Bamako, en el que los terroristas tomaron de rehenes al menos a 170 personas. La operación causó unos 27 muertos –entre ellos, un francés y un belga– y varios heridos.
