El terrible suceso ocurrió en Chile: mientras los progenitores estaban muertos en la habitación, el niño estaba en la suya, hasta que avisó a la abuela.
Una situación dramática debió soportar un niño de apenas 10 años. Pasó dos días en la misma casa junto a sus padres muertos.
El terrible suceso suceció en Rancagua, Chile. Según trascendió, se trata de un femicidio y de un suicidio ocurrido durante el pasado fin de semana y se descubrió el martes luego de que el hijo de la pareja encontró los cuerpos y alertó de la situación a su abuela.
Raúl Carrillo Herrera, trabajador temporario de 29 años, llegó a su casa y se encerró en su dormitorio junto a Grisela Vargas, técnico paramédico de 27, su pareja desde hacía 10 años.
Carrillo tomó almohadas y asfixió a su pareja en la cama, y posteriormente con una cuerda se ahorcó.
Mientras, el hijo de 10 años estuvo todo ese tiempo en el primer piso de la vivienda. Según relato el menor, durante estos días se alimentó de caramelos y pan.
Hasta que decidió avisar a su abuela materna de la situación, quien es la única pariente que tiene en la ciudad. Le dijo que sus padres no acudían a sus llamados y estaba asustado, luego, se enteraron con el dramático suceso.
