Una serie de History muestra una investigación que analiza el posible escape de Berlín y su establecimiento clandestino en algún otro lugar del mundo, como la Argentina.
[youtube youtubeurl=»DlzdHzGHXFA» ][/youtube]
La versión histórica oficial dice que, ante la inminente derrota del Tercer Reich en la Segunda Guerra Mundial, Hitler se suicidó en su bunker el 30 de abril de 1945. Sin embargo nunca se encontró su cuerpo en ese lugar, ni tampoco evidencia fehaciente de que haya muerto allí. Ante este cuadro surgieron versiones que sostienen que cuando Berlín cayó en mano de las tropas soviéticas el Führer escapó y se dirigió a algún lugar del planeta adonde continuó su vida con identidad falsa. Esta hipótesis es la que se investiga en la serie de ocho documentales Persiguiendo a Hitler que pondrá al aire History desde mañana, los miércoles, a las 21.
La base de los documentales está dada en el trabajo realizado por el equipo que dirigieron Bob Baer, un vererano de la CIA, con 21 años de experiencia en inteligencia militar y el doctor John Cencich, un prestigioso investigador de crímenes de guerra, al analizar el contenido de 800 documentos del FBI recientemente desclasificados y la visita a países como Argentina, Brasil, Colombia, Las islas Canarias, Alemania y España, sitios donde puede haberse dirigido Hitler luego de huir de Berlín.
[youtube youtubeurl=»FVEbhC6tp4w» ][/youtube]
El primer episodio de la serie plantea uno de los casos más novedosos. Se trata de una investigación que llevó a cabo el equipo en Charata, un pequeño pueblo ubicado en la provincia de Chaco, en nuestro país. Resulta que uno de los documentos secretos del FBI, con fecha de agosto de 1945, dice que Adolf Hitler estuvo viviendo en un gran sótano debajo de una hacienda junto a cientos de nazis, en una localidad a 1086 kilómetros al oeste Florianópolis y a 724 kilómetros al nornoroeste de Buenos Aires. El cruce de ambas coordenadas ubica el punto en una zona rural de la Argentina y el pueblo más cercano a ese lugar es Charata.
Una parte del equipo de investigadores, comandados por el militar Tim Kennedy, el periodista Gerard Williams y el cazador de nazis Steve Rambam, visitaron la provincia de Chaco con el objetivo de localizar el búnker a través de pistas sobre el posible sótano donde Adolf Hitler se habría ocultado al finalizar la Segunda Guerra Mundial. El testimonio de un anciano que evidencia la presencia de nazis en la zona 70 años atrás; la visita a una escuela alemana, en la que los alumnos aprendían bajo un régimen de enseñanzas con características disciplinarias similares a las utilizadas por el partido nacional socialista alemán y cuyo director, Carlos Buck, aparece en una lista de los documentos del FBI como un dirigente de ese partido; el aporte de Juan Alberto Miérez, un historiador y escritor local que puntualizó acerca de la presencia de alemanes en el pueblo de Charata y quien revela al equipo que en 1970 se encontró un sótano en una chacra el oeste del pueblo que podría ser el que señala el documenta del FBI, llevaron a los especialistas a sostener como posible la presencia del ex Fürher en la zona.
Finalizada la guerra, unos 60.000 alemanes, ex integrantes del partido nazi se trasladaron y vivieron en Argentina, creando una red de comunidades que se interconectaba con otras diseminadas por Sudamérica. En los documentos desclasificados por el FBI, la provincia de Misiones también aparece como uno de los puntos en lo que alemanes afines al Tercer Reich se habrían establecido y creado una comunidad en nuestro país. Los especialistas creen que había una red de túneles entre la comunidad de Charata y Misiones por la que los nazis se trasladaban. En el año 2015, el arqueólogo Daniel Schavelzon, director del Centro de Arqueología Urbana de la Universidad de Buenos Aires, junto con su equipo de arqueólogos encontró en la selva misionera ubicada en el parque Teyú Cuaré, en San Ignacio, una estructura de piedra que según el saber popular se trataba de construcciones de los jesuitas. Sin embargo, los investigadores internacionales junto a los arqueólogos locales aseguran que se trataría de una posible guarida de autoridades del Tercer Reich adonde también se hallaron elementos y armas fabricadas en Alemania. «No hay nada jesuítico allí. Salvo un solitario clavo de principios del siglo XX, no hay nada allí que sea anterior a los años 40», declaró oficialmente Schavelzon tras el hallazgo en marzo de 2015.
Luego del primero, los siguientes episodios incluyen la investigación sobre la aparición de un submarino alemán U-Boat en costas argentinas; el descubrimiento de nuevos túneles subterráneos encontrados en Alemania, especialmente uno que unía el famoso bunker con el aeropuerto de Tempelhof ; el hallazgo en un pantano de Colombia de los restos de un misterioso avión que podría haber transportado a Hitler; y otras pistas que se investigan en la serie.