La Comisión Nacional de Áreas Naturales de México confirmó en las últimas horas que hicieron contacto con un ejemplar de ballena gris albina. Lo sucedido es todo un acontecimiento, ya que hasta la fecha se trataba de la primera y única en su tipo, pero habría estado en compañía de su cría.
La última vez que se supo de un cetáceo de tal magnitud fue en la temporada 2008-2009, y al parecer se trataría del mismo animal.
La ballena gris albina -apodada «galón de leche»- fue avistada en las aguas de la laguna Ojo de Liebre, en la costa oeste de del país norteamericano.
El hallazgo despertó sorpresa en los responsables del organismo mexicano por su particularidad y rareza. Por cuestiones genéticas, este mamífero sufre la ausencia de melanina, pigmento que da color a la piel, y lo que en definitiva hace dificultosa su vida en la naturaleza.