El intendente Jorge Capitanich participó este jueves del inicio de la subasta pública de bienes propios de la comuna en desuso y destacó el esquema de reconversión organizacional y tecnológica que se lleva adelante en el municipio.
El remate, que se realiza en las instalaciones del Club Vial, tiene como objetivo la obtención de recursos financieros que serán destinados al equipamiento del área de Tránsito del municipio.
“Estimamos que se recaudará una cifra sustancialmente superior a la base de subasta y que esos fondos servirán para la adquisición de motocicletas y un vehículo de transporte para el personal de Tránsito”, explicó Capitanich.
Los artículos llevados a remate fueron declarados en estado “malo” tras el censo de bienes muebles e inmuebles que se realizó en enero.
En este proceso, fueron relevados más de 140 bienes de los cuales aproximadamente la mitad fue declarada como sujeta a subasta, entre los que existen automóviles, tractores y motocicletas, pero también equipos de oficina.
El intendente explicó que el valor de estos bienes ronda los $500 mil y que la base conjunta del remate asciende a $534 mil, aunque se estima recaudar -una vez sean sometidos a puja pública- alrededor de $1,1 millones.
“Lo que estamos haciendo es desprendernos de bienes en mal estado u obsoletos, a partir de eso generar recursos financieros y esos recursos volcarlos a la adquisición de nuevo equipamiento y fortalecer así la capacidad de prestación de servicios”, explicó el jefe comunal.
La subasta se lleva adelante mediante un convenio suscripto entre el municipio y el Colegio de Martilleros y el Consejo de Martilleros.
Capitanich remarcó la importancia del esquema de reconversión organizacional y tecnológica en el ámbito de la comuna y aseguró que se trata de un método de suma transparencia.
Finalmente, y en cuanto al destino de los fondos que se recauden durante la jornada, anticipó que servirán para la compra de siete motocicletas y una camioneta tipo Traffic, que se sumarán al área de la dirección de Tránsito.
