Una madre de 22 años, que descansaba junto a su bebé internado en neonatología del Hospital del Bicentenario, denunció que se durmió y que al despertarse un enfermero estaba manoseándola. Tras la correspondiente denuncia, el enfermero fue separado del cargo.
Si bien la investigación recién comienza, preventivamente el enfermero fue separado de su cargo.