El subsecretario provincial de Derechos Humanos, Juan Carlos Goya, aseguró estar avergonzado por el accionar de la jefa de la comuna portuaria y la policía que se desempeña en el lugar.
Juan Carlos Goya se acercó por estas horas hasta la Municipalidad de Barranqueras, donde se extiende hace varios días un conflicto entre la intendencia y los trabajadores contratados y precarizados. Su presencia generó revuelo e inclusive se cruzó con efectivos policiales y autoridades del municipio local.
Esta mañana habló con Radio Libertad y comentó lo sucedido: «es indignante lo que encontré, trabajadores hostigados, sin comer», dijo el funcionario.
Entre los detalles que acercó a los medios, Goya remarcó que «fui a cumplir con mi trabajo y presenté documentación, poniéndome a disposición de la intendenta como mediador en el conflicto. «Hay un protocolo que respetar, el derecho de protesta está garantizado por la Constitución, a estas personas le cerraban los baños, había policías que por orden de la comisaría hostigaban a los huelguistas, y no termina ahí, sino que la decisión fue personal de la Jefa de la Comisaría.
El problema, al parecer, tiene para rato. Goya responsabilizó directamente a Alicia Azula, a quien culpa de la difícil situación. «Le niegan ingreso a un baño a los trabajadores, Azula tendría que pensar seriamente en esta actitud que está teniendo, es increíble, vamos a hacer un requerimiento judicial muy fuerte», adelantó.
Finalmente, en una muestra clara de descontento para con las fuerza de seguridad, Goya sentenció que «me da vergüenza que la policía de mi gobierno haga estas cosas».