Justamente el día que Jorge Milton Capitanich cumplió 100 días al frente de la comuna capitalina, el presidente Macri visitó la provincia, donde “coqui” le entregó la llave de la ciudad a pesar de defenestrarlo en más de una ocasión. Este es, quizá, el único acto positivo que tuvo el referente del PJ nacional en este lapso de gobierno, muy lejos de lo que fuera su buena gestión al frente de la provincia.
Cada vez que algo sube de precio, se responsabiliza a Macri y compañía por su política económica. Sin embargo, poco y nada se dice respecto a los tremendos aumentos que azotaron a los vecinos de resistencia respecto a las tarifas municipales, donde aumentó un 35% el patentamiento, un 66% el impuesto a inmuebles y el Estacionamiento Medido trepó en cifras que superaron el 100% de aumento, donde además deben sumarse las cuadras nuevas de cobro, y la tarifa “discriminatoria” respecto a los coches que tienen patentamiento de otro lado que no sea Resistencia.
Sin dudas, estas no eran las promesas de campaña de Capitanich; cuyas elecciones municipales –debe recordarse- no fueron para nada buenas, habida cuenta que un poco conocido Leandro Zdero estuvo muy cerca de los votos obtenidos por el exgobernador, a pesar de los años de gestión sobre sus espaldas.
Para colmo, la intención de mejorar el tránsito de la ciudad con estas medidas tampoco surtió efecto, porque ahora es más caro estacionar pero el caos es peor que hace meses atrás.
Los inspectores de tránsito que iban a recibir “una capacitación superior”, parece que aún no terminaron el curso, ya que se ve a los mismos de siempre y los nuevos tienen la misma tesitura que los de antes: multas a mansalva, si se puede “arreglar” algo para zafar se “arregla”, pero de ordenar el tránsito, nada de nada.
PAVIMENTO
Hablaba de 5000 cuadras de pavimento para “una ciudad postergada durante 16 años” (SIC), y hasta ahora solo hubo un par de cuadras anunciadas (14 para Villa Los Lirios) y ninguna concreción. De una rápida cuenta matemática, según la promesa de Capitanich, deberían concretarse poco más de tres cuadras por día de pavimento. Hasta ahora, eso no sucedió.
Es más, recién en la última semana se vio cuadrillas trabajando en reparar los numerosos baches existentes en Resistencia. Se tardó un poco.
BASURA
A lo que aún no le encontró ninguna vuelta Capitanich, en estos 100 días, es al tema de la basura. Es más, debió “bajarse los pantalones” ante la empresa PIMP S.A. para volver a contar con un servicio de recolección de residuos, a pesar de las barbaridades que dijo el entonces gobernador cuando Aída Ayala acordó con esta empresa que, en rigor, fue un acuerdo espurio, pero que nadie, ni los más cercanos a Capitanich, pensaban que volvería a acordar con esta firma.
No obstante este acuerdo, la ciudad es literalmente, una mugre, con basurales por donde se mire y un servicio de recolección deficitario.
Válido es recordar que con Aída Ayala los basurales espontáneos aparecían como las moscas, de hecho, Capitanich se apoyó en esto para defenestrar la gestión; sin embargo, el servicio de recolección por los lugares estipulados era bueno, algo que hoy no sucede.
CIUDAD INUNDADA
Otro de los puntos flacos de la gestión Aída Ayala fue la inundación en Resistencia cada vez que caían 4mm de agua.
Vale recorrer el centro en cada lluviecita para darnos cuenta que nada, absolutamente nada cambió en cien días.
AUMENTOS
Lo que si mejoró notoriamente fue el sueldo… de los funcionarios, donde sus funcionarios de grupo 40 pasaron a cobrar más de $31000 de básico; mientras que los de grupo 22 cobran desde esta gestión $33700. El aumento para los municipales es de poco más del 20% para todo el año…
CONCLUSION
En fin, poco y nada puede rescatarse de estos primeros cien días de Capitanich al frente del municipio como positivo. Si no podemos dejar pasar por alto la muerte del joven en la puerta del boliche Santino, donde la medida tomada fue clausurar a posteriori el local bailable… pero ¿cómo se le quita a la familia de Juan Alberto Sánchez que la medida no llegó un poco tarde?
Queda mucho tiempo por delante, por el bien de Resistencia, es necesario que la conducción de un volantazo en pos de mejorar de una vez por todas la postergada capital chaqueña.
