La ex jefa de Estado arribó al Aeroparque Metropolitano en un vuelo procedente de El Calafate. La esperaron manifestantes kirchneristas. El miércoles deberá presentarse ante el juez Claudio Bonadio
La ex presidente Cristina Kirchner llegó esta noche, a las 21.46, al Aeroparque Metropolitano en un vuelo procedente de El Calafate. Un nutrido grupo de militantes se congregó en las afueras de la terminal aérea porteña para darle la bienvenida. Acompañada por Oscar Parrilli, la ex jefa de Estado se mostró sonriente y saludó a los manifestantes.
Entre los militantes que la aguardaban había banderas de La Cámpora, de Nuevo Encuentro, Kolina, Partido Comunista Congreso extraordinario, el peronismo de Avellaneda con el intendente Jorge Ferraresi a la cabeza; La Martín Fierro, Solidaridad e Igualdad, Movimiento Evita, Miles de Luis Delia, Movimiento Octubre, de los radicales de Los Irrompibles y de la cibermilitancia «Resistiendo con Aguante».
Todos ellos se agolparon en el sector de arribos, donde se montó un operativo especial de seguridad y luego se desplazaron hacia el playón, donde se preveía iban a tomar contacto directo con Cristina.
Minutos después, la ex mandataria dejó la terminal aérea y se dirigió a su casa de Recoleta, donde más temprano había llegado su hija Florencia y donde también se apostó desde temprano un grupo de seguidores K.
Salida de El Calafate
Unos 200 seguidores también la despidieron en El Calafate. Primero se reunieron frente a su vivienda y luego la acompañaron en caravana hasta el aeropuerto. Allí tomó el vuelo 1893, que partió a horario, a las 19.12.
El vuelo de Aerolíneas no tuvo inconvenientes a pesar de que personal de la empresa prestadora de los servicios de remises que usa el personal de vuelo realiza un paro de actividades que genera demoras y cancelaciones en el sector de partidas.