El dirigente del Frente Renovador se entrevistó con integrantes de la comisión directiva de la Asociación de Profesionales, Técnicos y Auxiliares de la Salud del Chaco, uno de los gremios de mayor conflictividad de la provincia. “El estado de situación es complejo, pero si no hay canales de diálogo no hay manera de empezar a resolverlo”, advirtió Sánchez.
En el marco de una protesta que nuclea a todas las centrales obreras del país y a escasas 48 horas de conmemorarse el Día de los Trabajadores, el reclamo de APTASCH no sobresale por novedoso sino “por la sensibilidad del servicio que presta”, señaló Sánchez.
“Es incomprensible que el Estado provincial los ningunee, que dialogue con otros gremios como UPCP pero que no tenga un canal de comunicación permanente con estos profesionales a los que convoca de vez en cuando en una pantomima de paritaria que no conduce a ninguna parte”, analizó.
En ese marco, el dirigente precisó: “No tienen carrera profesional, se jubilan en el mismo escalafón en el que ingresaron porque la ley sigue sin reglamentarse; durante ocho años se construyeron hospitales en todo el territorio pero el recurso humano no se incrementó proporcionalmente, y como los sueldos son tan bajos a los profesionales no les dan los números para arriesgarse en el Interior y la salud pública se va quedando vacía; es una situación grave porque está en juego la calidad del servicio de salud”, detalló.
“Desde el gremio aseguran que las falencias en el sistema de salud tal y como está funcionando actualmente incluso se ha cobrado vidas, algo que oficialmente se oculta, pero también hay problemas de seguridad para los trabajadores y los pacientes en muchos hospitales y centros de salud; faltan insumos y personal, es una situación límite”, analizó.
Para Sánchez es un error reducir el conflicto del sector a la dureza de la dirigencia gremial: “El reclamo de estos profesionales es la punta del iceberg de una situación terminal en la salud pública, hace falta mucho tiempo y dinero para reconstruir un sector del Estado abandonado desde hace décadas o maquillado con edificios que son cáscaras vacías: el camino es sentarse en una mesa a buscar soluciones inteligentes, por eso tendría que recibirlos el propio Gobernador: la Salud Pública es una razón de Estado”.