La gerenta de la Unión de Cooperativas Algodoneras Ltda., Claudia Verón reconoció que el sector cooperativista «colapsó». Destacando que el proceso de reconversión de las entidades para su salvataje «necesita un tiempo y que el Estado tenga una mirada más concreta en acompañar los proyectos de ley que proponemos».
la directiva aseguró que, «estamos en el punto culminante de esta crisis, que no es una novedad; sino que viene desde muchos años atrás. La situación ya colapsó y el sector cooperativo se está reflejando en el cierre de la desmotadora de la Cooperativa Sáenz Peña que, mayormente en el sector social, tiene un gran impacto».
Claudio Verón reconoció que, puertas adentro, UCAL y la dirigencia del sector venía tratado hace tiempo, «cómo sacar a flote a las cooperativas y buscar alternativas junto al resto de la actividad algodonera».
Atribuyendo que otros problemas, como la indetenible disminución del área sembrada del textil por diversos factores, «terminó por influir en la crisis de la principal actividad de las cooperativas, como son sus desmotadoras».
La gerente de UCAL, preguntada al respecto, consideró que algunas cooperativas buscaron por fuera del desmote otras alternativas para adecuarse al momento, como la instalación de supermercados, provisión de energía eléctrica o producción de elementos balanceados. «En sí mismas, las cooperativas siempre tuvieron como objetivo acercarle todo lo que necesite al productor; pero ninguna pudo alcanzar un nivel de reconversión. Algo que hoy estamos buscando al gobierno provincial y nacional», agregó.
«Este es un tema que hay que trabajarlo de fondo, lleva un tiempo no menor al año; pero ahora las cooperativas deben atender al productor con las campañas en marcha y se necesita superar este momento», dijo Verón.
Sosteniendo que «necesitamos resolver dos problemas en las cooperativas. Uno es el hoy de una nómina de empleados con una antigüedad muy importante, para lo cual se viene trabajando seriamente en una ley que permita una solución previsional a estos trabajadores. Y aunque esto nos está costando demasiado, intentaremos encontrar una salida con el señor gobernador».
«Las cooperativas están colapsadas por personal y una disminución tremenda de actividad, para lo cual a esta gente se la reubicó. Porque a las cooperativas se las puede criticar en cuanto a sus desempeños administrativos, pero han sido importante en la atención y contención de nuestros productores y la generación de mano de obra», describió la gerente de UCAL.
Subrayando que, «para lograr la reconversión del sector cooperativo algodonero necesitamos la mano del Estado; que éste tenga una mirada más concreta en abocarse en acompañar estos proyectos de ley que proponemos».
