El terreno en la franja chaqueña está convertido en un pesado lodozal en parte y casi en un desierto en otros sectores.
Un panorama desgarrador se vive en la zona del río Pilcomayo, lado paraguayo. El terreno en la franja chaqueña está convertido en un pesado lodozal en parte y casi en un desierto en otros sectores. La mortandad de animales crece día a día, mientras otros pocos intentan respirar sumidos en el barro. El lado paraguayo se va secando, mientras todo el caudal va hacia al lado argentino, según informó el diario Última Hora.
Un poblador recorrió la zona de Laguna Escalante, General José Eduvigis Díaz, y filmó terribles escenas de cómo los animales van agonizando en los rastros de lo que fuera el caudal del Pilcomayo.
Don Zenón Morínigo, un pequeño ganadero de la comunidad, pudo captar a cocodrilos ya sin fuerzas atrapados en el lodo. La laguna que por muchos años dio vida al pueblo Nivaclé, hoy es un pantano mortal, describió el corresponsal de ÚH, Luis Echagüe.
Las comunidades indígenas que históricamente dependían del río para sustentarse hoy viven momentos dramáticos por la escasez de agua y mortandad de animales. Toda la población está afectada y se aguarda que el nuevo director del Pilcomayo, Ing. Óscar Alberto Salazar Yaryes, pueda contribuir con alguna respuesta pronta.
Hay mucha preocupación porque las aguas se van a Argentina y del lado paraguayo nada, expresan los pobladores. Según los pronósticos de Meteorología hay como cinco meses más de ausencia de lluvia en la zona. Recién en diciembre se tendrían lluvias, lo que implica que habría aún mayor mortandad de animales.
Cocodrilos, carpinchos y peces van desapareciendo, mientras las cigüeñas que se alimentan de peces van aproximándose. Los animales vacunos, ovinos, caprinos, todos los de granja están expuestos a morir ante la ausencia de agua. Los pérdidas son enormes para los ganaderos de la zona.