El legislador destacó que “la Ley de la Agricultura Familiar fue sancionada en noviembre de 2013, sin embargo, aún hay puntos pendientes de resolución, entre ellos, la asignación de presupuesto acorde para su ejecución; impulsar políticas, planes, programas de desarrollo rural; y la normalización del funcionamiento del IDRAF. En este sentido, todavía no se cumple la ley”.
“Esta ley, al igual que la de los Consorcios Productivos de Servicios Rurales, salieron con amplio consenso y debemos recordar todos los compromisos establecidos en ellas y ocuparnos para que no queden en la letra nada más”.
“Reiteradamente hay reclamos y denuncias de parte de organizaciones de pequeños productores de una serie de hechos que se vienen sucediendo en el Ejecutivo provincial en el marco de estas leyes, principalmente la falta de cumplimiento con los recursos comprometidos y de asignación real de fondos.
La implementación en forma clara de la reglamentación de la Ley de Agricultura Familiar que garantice la participación de las organizaciones del sector en este proceso, es otras de las cuestiones que se reclaman”.
“El IDRAF, como entidad autárquica del Estado Provincial, con dependencia funcional del Ministerio de Producción y con las atribuciones que le confiere la Ley en todo cuanto concierne a los aspectos de promoción del desarrollo rural sustentable, vinculado a los productores familiares y trabajadores rurales, no se refleja en la realidad. Hoy el Instituto de Desarrollo Rural y Agricultura Familiar, sufre una intervención”.
“Los pequeños productores familiares y los trabajadores rurales no se sienten participe en la misión que establece la ley de proponer el diseño, la planificación y el control de las políticas relacionados con los procesos productivos, la infraestructura rural, los servicios rurales, las tecnologías apropiadas y las políticas sociales del conjunto de la población rural”, concluyó el presidente de la Comisión de Agricultura y Ganadería de la Cámara de Diputados del Chaco Roy Nikisch.