La ex presidente Cristina Kirchner arribó a la Capital Federal este sábado por la noche en un vuelo proveniente de Santa Cruz, de donde partió pasadas las 19, previo a ser acompañada por un grupo de seguidores desde que dejó su casa.
Fuentes cercanas a la ex presidente le confirmaron que uno de los motivos por los que Cristina Kirchner viajó a Buenos Aires es para celebrar el cumpleaños de su hija Florencia; en medio de un agravamiento de su situación judicial, con causas abiertas y pronunciamientos de distintas instancias de la Justicia que la investiga por delitos de corrupción.
Con La Cámpora a la cabeza, la militancia kirchnerista se congregó en los alrededores de la terminal. El objetivo: esperarla, tal como ocurrió cuando en abril pasado regresó para comparecer ante el juez Claudio Bonadio.
Desde antes de las 21 comenzaron a llegar referentes del espacio, como Andrés «Cuervo» Larroque y el ex titular de las AFI Oscar Parrilli.
Los militantes portaban banderas de distintas agrupaciones y coreaban canciones de respaldo a la ex mandataria.
La llegada de Cristina Kirchner, esta vez, se produce con el impacto indudable que generó la escandalosa detención de José López, quien fue el secretario de Obras Públicas de sus dos gobiernos y del de su marido, Néstor Kirchner.
El fallo del tribunal de alzada y una serie de allanamientos a sus propiedades provocaron una airada protesta de Cristina Elisabet Kirchner, que denunció violaciones a las garantías constitucionales y del Estado de Derecho y consideró que todo se trata de «una tapadera del ajuste».
Tras dos cartas publicadas en Facebook y Twitter, ahora la ex presidente tomó la decisión de volver a Buenos Aires para, creen sus seguidores, asumir su defensa judicial y, sobre todo, política. «Quieren crear un nuevo tipo penal: haber pertenecido al gobierno entre 2003 y 2015», expresó.
