Un hombre de los Estados Unidos que caminaba a sus dos trabajos de salario mínimo cada día ahora tiene un nuevo par de ruedas gracias a la bondad de los extraños y un post viral de Facebook.
Kyle Bigler tiene 2 trabajos y camina 26 kilómetros diarios para llegar a ellos. Una mujer conoció su historia, la subió a Facebook y su vida cambió.
Bigler de 25 años, vive en Belmont, New Hampshire, Estados Unidos, solía caminar un total de 26 kilómetros por día a dos trabajos en distintos restaurantes. En ellos le pagaban el salario mínimo.
Como si eso fuese poco, generalmente trabajaba un turno de día en uno de ellos, seguido de un turno de noche en el otro.
Su vida, sin embargo, tomó un camino sorprendente, luego de que Joanna Griffiths lo viese caminando tres veces en un solo día.
Griffiths, sintió tanta curiosidad que terminó charlando y conociendo a Bigler, le sacó una foto y compartió su historia en su perfil de Facebook.
En una entrevista con el canal CTV News de Canadá, Griffths dijo que el trabajo duro de Bigler y su bondad la habían impactado mucho.
«Si no sabías nada de él, probablemente pensabas que era una persona común, trabajando en un trabajo común… Pero es tan generoso y tan bueno», dijo.
Griffiths afirma que Bigler, cuyo uno de sus trabajos es en una cafetería local, conoce todos los pedidos de sus clientes regulares y lo que les gusta.
«Conoce como le gusta el café a cada uno de ellos y nunca te darías cuenta de que había trabajado ocho horas en el turno anterior y, encima, había caminado para llegar hasta ahí».
Griffiths después descubrió que Bigler trabaja en varios lugares para mandarle su dinero a su joven hijo, que vive en otro lugar del país.
La mujer alabó al chico por ser un trabajador tan comprometido y lo describió como una inspiración.
«Este hombre muestra que si estás motivado, sos ambicioso, y estás dispuesto a trabajar, sí es posible», escribió.
Entre los miles de comentarios en el artículo que subió Joanna a Facebook, se encontraba el de una concesionaria de autos local, AutoServ, la cuál expresó su interés en darle a Bigler un auto y gratis.
«Es una persona muy orgullosa y al principio estaba muy dudoso de aceptar porque no sabía si iba a poder pagar el seguro», cuenta Joanna.
AutoServ entonces se estiró un poco más y lo ayudó a cubrir seis meses del seguro para autos, mientras Griffiths lo ayudaba con el resto.
«Podés juzgarlo muy rápidamente, porque tiene pelo loco, piercings y una severa dificultad del habla. Pero si podés dejar todo eso de lado y tener una conversación de 30 segundos con él… es tan amable.
Si todo el mundo tratase de ser un poco más bondadoso con el otro, creo que el mundo sería un lugar mucho mejor», concluyó.
