Un análisis de alrededor de 50 estudios globales reveló que solo una de cada diez personas sostiene el ejercicio por más de seis meses. Las causas de la deserción.
El ser humano es evolutivamente corredor, vive para correr pero se comporta como sedentario. «Esta es la nueva pandemia que debemos enfrentar y que trae con ella otra decena de patologías que atentan contra la vida», disparó el licenciado en Sebastián Del Rosso.
El especialista en actividad física y estilos de vida también asoció el ejercicio con el óptimo desarrollo cerebral. Tras enumerar más de 50 nuevas investigaciones mundiales que abordan la problemática del sedentarismo, reconoció que entrenarse no sólo trae beneficios para la salud de las personas sino que, por cuestiones epigenéticas, también mejorará las adaptabilidad de futuras generaciones (logros en el rendimiento, estado físico en general y capacidades de adaptación al entorno).
En la misma sintonía y con igual preocupación se manifestó el licenciado Luis Antoniazzi -doctorado, docente universitario y autor de libros sobre la biomecánica del ejercicio-, quien aseguró que sólo una de cada 10 personas que comienzan a realizar una actividad física es capaz de permanecer en ella durante todo un año. El restante 90% abandona antes de los 6 meses.
En el marco de las «XIX Jornadas de Medicina Nutricional y Obesidad» organizadas por la Fundación Diquecito, el especialista enumeró entre las causas de la deserción: las expectativas infantiles y mágicas, las perspectivas de éxito muy altas y el entorno no favorable. Además, puntualizó en la importancia de elegir una actividad que agrade y genere placer para favorecer el sostenimiento de su práctica a largo plazo. Por último, hizo hincapié en la necesidad de un buen descanso, indispensable para la reparación muscular y generar así las condiciones para empezar a moverse y darle batalla a la pandemia del sedentarismo.
Obesidad en aumento, preocupación en crecimiento
Durante el encuentro, se actualizaron también estadísticas que continúan marcando la tendencia hacia un mundo más obeso. Esta problemática sigue siendo advertida por los especialistas, que remarcaron «la falta de políticas públicas de impacto» que concienticen y reviertan dicha tendencia.
En su presentación, el doctor Rafael Figueredo Grijalba, vicepresidente de la Sociedad Latinoamericana de Nutrición (SLAN), alertó sobre el aumento de las personas que padecen sobrepeso u obesidad. De este modo reconoció que más de la mitad de los argentinos sufre de alguna de ellas, llevando al 57,6% los porcentajes de obesidad y sobrepeso en nuestro país (según datos de la última Encuesta Nacional de Factores de Riesgo para Enfermedades no transmisibles de 2013).
Asimismo, sostuvo que 1 de cada 3 personas muere por algún evento cardiovascular y es allí donde la obesidad abdominal incrementa sustancialmente los riesgos. Por otro lado, el especialista actualizó los índices de expectativas de vida, siendo para los hombres un promedio de 72 años y -fruto de la protección de los estrógenos- para las mujeres asciende a 79 años en promedio.
Uno de los puntos centrales del evento fue la presentación de la doctora Mónica Katz, coordinadora del Grupo de Trabajo Obesidad de la Sociedad Argentina de Nutrición (SAN), autora de libros y numerosos trabajos de investigación, además de ser un respetado miembro de la comunidad científica nacional e internacional. En su exposición «Tejido adiposo: un órgano inmuno endócrino», llamó a la obesidad «una epidemia de muerte lenta» y se preguntó si los agentes de salud están preparados para abordarla.
Además instó a trabajar con urgencia y a abandonar todas las propuestas mágicas sino a «medicalizar» la obesidad, tratándola no como una cuestión estética sino como una enfermedad que se lleva la vida.