También la región NOA vive la misma situación con respecto a los salarios. Las excepciones son Misiones y la Rioja. El Chaco y Corrientes, a la cola. Se tienen en cuenta, como parámetro, las remuneraciones brutas, netas y la inflación.
Recientemente, un informe de la consultora Economía y Regiones, tomando datos del INDEC, expuso que la “remuneración bruta” promedio mensual del sector privado registrado al primer trimestre de 2016 llegó a $17.327, lo que significaría un incremento del 31,7% respecto al mismo período del año pasado. Mientras que la “remuneración neta”, por su parte, es de $14.931,5 creciendo 31,4% a nivel interanual.
Cabe destacar que, si se toma la inflación interanual estimada por el Congreso Nacional en el primer trimestre (+33,1%), los sueldos del sector privado (brutos) presentaron una caída real de 1,1%, mientras las remuneraciones netas una baja del 1,3%.
Las remuneraciones más altas del sector privado corresponden a provincias de la Región Patagónica y la Ciudad de Buenos Aires, siendo Santa Cruz la provincia con mayor remuneración promedio mensual ($32.129).
En tanto, Santiago del Estero y La Rioja (que pertenecen a la región del NOA) son las provincias de menor remuneración bruta ($11.032 y $11.621, respectivamente). Si se comparan estos niveles con los de la Provincia de mayor salario promedio (Santa Cruz), se tiene que la remuneración promedio santacruceña es 2,91 veces superior a la de la provincia de menor salario.
El incremento interanual de los salarios privados también resultó heterogéneo a nivel provincial, al observarse 11 provincias donde los salarios crecieron por encima del promedio (31,7%). La Provincia de Neuquén fue la que mostró la menor variación (20%), mientras que Formosa la mayor (38,4%).
A nivel regional, los menores incrementos nominales de las remuneraciones se observa en la región Patagónica (+24,7%) y Cuyo (+30,8%), únicas regiones que crecieron por debajo de la media nacional. En cambio, crecieron por encima de la media nacional la Región Centro (+33,1%), Pampeana (+32,8%), NOA (+32,6%) y NEA (+32,4%).
«Como venimos mencionando en informes anteriores, las diferencias provinciales, y regionales en los salarios y sus incrementos, están directamente relacionados con el entramado productivo, las negociaciones colectivas, el nivel general de precios y la situación del mercado laboral (oferta y demanda de mano de obra) en cada región geográfica. Es así como la región Patagónica y la Ciudad de Buenos Aires presentan los mayores niveles salariales, dado que gran parte de su economía se encuentra ligada al sector hidrocarburífero y los servicios financieros, respectivamente» aseguraron los elaboradores del informe.
Las características salariales del sector industrial y de las economías regionales, con una elevada competitividad internacional, explican los niveles de salario vigentes en las provincias intermedias.
Por último, las condiciones salariales del sector agropecuario y comercial establecen los niveles salariales del sector privado en las provincias del Norte Grande (NEA-NOA). Además, las regiones con mayores niveles de pobreza, desempleo y empleo informal, tienden a generar un “achatamiento” en las remuneraciones medias, producto de la abundante mano de obra (no calificada) disponible. Una excepción presenta Catamarca, que, aunque mantiene las características descriptas, es la provincia del NEA-NOA con los salarios privados más altos traccionados por la minería.