El ministro del Interior, Bernard Cazeneuve, informó que la cantidad de víctimas fatales había ascendido a 80 y que 18 de los heridos se encontraban en estado crítico.
El Ministerio del Interior dijo que el conductor del camión, el único atacante, fue muerto a tiros por la policía, y autoridades regionales afirmaron que dentro del vehículo se hallaron armas, granadas y explosivos.
El presidente de Francia, Francois Hollande, afirmó que «no se puede negar el carácter terrorista del ataque», entre cuyas víctimas hubo «varios niños», y anunció que prorrogará por tres meses el estado de sitio que iba a vencer el 26 de este mes, entre otras medidas excepcionales de seguridad, debido a que «toda Francia está bajo la amenaza del terrorismo islamista».
Asimismo, fuentes de seguridad revelaron que en el interior del camión se hallaron documentos de identidad de un ciudadano franco-tunecino de 31 años domiciliado en Niza pero se desconocía si se trata del autor material del atentado, informaron varios medios franceses y reprodujo la agencia EFE.
En tanto, el fiscal antiterrorista de Francia, Francois Mollins, cuyo departamento quedó a cargo de la investigación, según la Fiscalía General de la República, dijo que todo indicaba que se trató de un atentado, pero no dio más detalles.
Hasta esta madrugada ningún grupo había reivindicado el ataque, que llegó luego de que más de 140 personas murieran el año pasado en Francia en atentados islamistas radicales, incluyendo a 130 en una serie de ataques en París cometidos en noviembre pasado por el grupo Estado Islámico (EI).
Sin embargo, los rumores sobre un posible atentado con motivación política o religiosa comenzaron a crecer en los medios franceses luego que Estrosi informara en su cuenta de Twitter que dentro del camión del atacante habían armas, granadas y explosivos, y que el conductor actuó de «manera premeditada».