El chamamé está de luto. El reconocido acordeonista Nini Flores de 50 años, fue hallado muerto en su casa esta mañana y, según confirmó la Justicia, sufrió un paro cardiorrespiratorio (no traumático). Sus restos fueron velados en el Teatro Vera.
Familiares, amigos, personalidades de la música y la cultura, y conocidos, se acercaron para despedirlo. Uno de sus amigos, Monzón, destacó: “estamos tan sorprendidos como tristes. Nos dejó una enseñanza completa y perfecta. Desde lo humano y lo profesional”.
“Tuvimos la enorme dicha de compartir momentos íntimos, de buena amistad. Lo que lo quisimos bien, lo recordaremos como el buen amigo que fue”, destacó.
Para finalizar, Monzón, en declaraciones radiales, expresó: “El chamamé tiene una raíz muy profunda que no debe desvirtuarse. Hay que tratar de encontrar lo que Nini supo encontrar: embellecer el chamamé, aportando nuevos sonidos, pero sin desvirtuarlo”.
El hecho
Flores vivía en un casa ubicada sobre la Avenida J. R. Fernández, en el acceso al barrio Industrial, y se había quedado solo ya que su esposa había viajado a la vecina provincia de Chaco. Allí el músico de 50 años fue encontrado, tirado en el baño, por su madre.
Familiares y amigos se acercaron hasta la vivienda, conmovidos por la noticia. Uno de ellos, Matías González, integrante del grupo “Trébol de Ases” y gran amigo de Flores, dialogó con los medios presentes en el lugar.
“Nos cayó como un balde agua fría lo sucedido. Fue un hombre muy estudioso, con muchos proyectos, que hizo trascender el chamamé más allá de Corrientes”, señaló visiblemente acongojado. “Nos deja su enseñanza y su búsqueda de nuevos sonidos respetando la esencia del género.”
Aunque dijo desconocer si tenía algún antecedente cardíaco, González recordó que el músico “era muy fumador”.
Desde el Instituto de Cultura, el director de Artes Escénicas, Eduardo Sívori, sostuvo: ”Hablamos con la familia y vamos a velarlo en el hall del teatro. Estamos esperando que llegue el cuerpo.
Es una pérdida lamentable, se fue uno de los más grandes de la música chamamecera, con proyección internacional. Hace poco se realizó una nueva edición del Festival de Invierno del Chamamé y yo recuerdo que él y Andy Balestra fueron los gestores de ese evento”, manifestó. Y pidió paciencia: “El espacio del hall es naturalmente pequeño así que pido a todos los que vengan paciencia”.
Una vida consagrada a la música
Nini Flores nació en 1966 en una familia chamamecera. Su padre fue el bandoneonista Avelino Flores, con quien grabó varios discos y se presentó en distintas ciudades antes de formar el dúo junto a su hermano Rudi.
Caracterizado por sus pares como “un estudioso de la música”, recorrió varios países a lo largo de su carrera. En 1985 realizó giras por Brasil y Paraguay junto a Rudi. Al año siguiente grabaron su primer disco, titulado “Rudi y Nini Flores” en RCA Víctor y se radicaron en Buenos Aires.
Tras presentarse en las principales ciudades de Argentina, realizaron su primer viaje a Europa en 1991 y dos años después, en 1993, grabaron su primer álbum en Francia, titulado “Chamamé, musique du Paraná”, que fue editado por la compañía francesa Ocora-France y distribuido en Europa, Japón y Canadá.
Más cerca en el tiempo, otro de sus hitos fue su participación en 1995 de la Misa Criolla, convocados por el Maestro Ariel Ramírez, con la que recorrieron varias ciudades de Argentina y Uruguay.
Meses atrás, y como preludio de las actividades del Bicentenario de la Independencia, el músico se había presentado en la Sala Sinfónica del Centro Cultural Kirchner, en el marco del ciclo “Música popular en grandes formatos”, con un concierto de 90 minutos en el que mostró, una vez más, su combinación de audacia y buen gusto para expandir las fronteras del género chamamecero.
Fuente: Diario Época.