Con el correr de las horas se supo que no fue un acto sexual sino que fue totalmente consentido.
Un hombre llegó a un hospital de la ciudad correntino de Goya con una lesión anal y un intenso sangrado y aseguró que fue violado por una travestí. Sin embargo, con el correr de las horas se supo que no se trató de un abuso sexual sino que fue totalmente consentido.
El sujeto había asegurado que contrató a una prostituta y que en pleno acto se dio cuenta que era un hombre, quien terminó violándolo.
Debido a que una conocida del hombre lo vio la noche anterior con la travestí tuvo que confesar que en realidad el encuentro sexual tuvo su aprobación y que no fue una violación.