Como todos los jueves el Centro Cultural Ercilio Castillo presenta un nuevo film de manera libre y gratuita.Hoy desde las 20.30, en el Centro Cultural Ercilio Castillo (López y Planes 336), se continuara con el ciclo de cine gratuito de todos los jueves.
En esta oportunidad se presentará el film alemán “Me siento disco”, dirigido por los directores Axel Ranisch y René Rinkus.
Sinopsis
Pensada para un público joven y para sus padres, la película apela a recursos admirables y honestos para provocar hilaridad pero también tristeza y congoja, contribuyendo a crear en el espectador un clima festivo o melancólico –según el momento- pero nunca con golpes bajos o disonantes, respetando las reacciones de cada uno de los personajes, actuados magníficamente por quienes interpretan a los padres y al joven Florian. Éste se mueve con notable fidelidad a su papel y con muy buenos recursos actorales, una característica que comparte con el resto de los intérpretes, constituyendo al filme en un muy buen ejemplo de cine de calidad con recursos técnicos excelentes y un guion brillante, por lo directo y claro.
Se destaca la participación de un músico popular, Christian Steiffen, quien se interpreta a sí mismo, y canta música disco como fondo de algunas acciones, en una participación surrealista, si se quiere, pero perfectamente ensamblada a la obra, que luce oportuna y es como el “alter ego” de Florian (quien lo admira, y junto con su madre lo imita), pero también de Hanno, su padre, cuando llega el momento de que éste empiece a tomar conciencia de lo que está pasando en sus vidas..
Sin ser agresivos en ningún momento, los realizadores presentan a los personajes con sus virtudes y defectos; con sus prejuicios y errores, y es por eso que la película mantiene siempre una tensión vivificadora, que estimula la capacidad afectiva del espectador y lo invita sin prepotencia a la reflexión proponiéndole ocupar el lugar de los personajes con quienes más identificado se sienta. En este sentido, puede decirse sin dudarlo que Me siento disco es una comedia de enredos, pero amable y honesta –ya lo dijimos antes- que presenta lo mejor del ser humano: la capacidad de reparar sus errores y de honrar la vida.