El gerente general de la compañía Minera Alumbrera, Raúl Pedro Mentz, fue procesado, sin prisión preventiva, por el juez federal número 2 de esta provincia, Fernando Poviña, quien lo consideró penalmente responsable por la contaminación de la cuenca de los ríos Salí-Dulce.
En su fallo, sin embargo, el magistrado dispuso el sobreseimiento del ex vicepresidente de la firma y actual titular de la Cámara de Comercio Argentino-Británica, Julián Rooney, y dejó sin efecto el llamado a indagatoria de Michael Lou Holmes, otro alto directivo de la minera.
El juez Poviña procesó a Mentz por considerar que está probada la contaminación con metales pesados provenientes de la industria minera del canal DP2, tributario de la cuenca Salí-Dulce, que desemboca en el dique El Frontal de Termas de Río Hondo, que comparten Tucumán y Santiago del Estero.
El fiscal general ante la Cámara Federal de Apelaciones de Tucumán, Antonio Gustavo Gómez, confirmó a LA NACION que apelará la sentencia para exigir que se revierta el punto que deslinda de responsabilidades a Rooney, e insistir con el pedido de indagatoria a Holmes. Lo mismo hará la ONG Pro-Eco, en su rol de querellante en la causa que se inició hace 16 años y que comienza a avanzar recién ahora, justo cuando Minera Alumbrera anunció su decisión de abandonar la explotación que lleva adelante en el yacimiento de Bajo La Alumbrera, en la vecina provincia de Catamarca.
En la sentencia, fechada el 26 de julio último, el juez Poviña ratificó la validez probatoria de los estudios realizados por el Instituto Nacional del Agua sobre muestras de líquido tomadas en 2012 por Gendarmería Nacional en el canal DP2 y en la planta de secado que Minera Alumbrera posee en la localidad tucumana de Cruz del Norte.
Metales pesados
El informe, que fue ratificado por peritos de la Universidad Nacional de Tucumán, reveló la contaminación de ese curso de agua, ubicado en la localidad tucumana de Ranchillos, con metales pesados (principalmente cobre) provenientes de los efluentes de la empresa minera.
El magistrado también evaluó un estudio realizado por el Instituto de Ecología Genética y de Evolución de Buenos Aires, que ratifica la presencia de cobre en el canal efluente de la cuenca Salí-Dulce y el embalse de Río Hondo, y advierte sobre los efectos negativos que ello genera en la salud pública. Según el informe, como consecuencia de la contaminación con cobre «son probables los problemas gastrointestinales a largo plazo, dado la capacidad de ese metal de bioacumularse, tanto en peces como en humanos que consumen la fauna acuática».
Con esos elementos, Poviña dictó el procesamiento de Mentz, a quien imputó como autor, penalmente responsable, por el delito ambiental contemplado y penado en la ley nacional 24.051, de residuos peligrosos.
El fiscal Gómez consideró que la sentencia implica «un avance en materia de sanciones penales contra la megaminería contaminante, porque el fallo considera que el delito ambiental es de peligro abstracto, lo cual quiere decir que no es necesario que se haya contaminado, sino que alcanza con el simple hecho de que exista un peligro de contaminación».
Según el fiscal federal, «las implicancias de esta resolución judicial son importantes para el futuro de la megaminería en la Argentina, porque el procesamiento del gerente general de la empresa más importante del sector es un claro mensaje para la actividad, que tendrá que hacer las cosas bien, sin contaminar».
Además, Gómez consideró que «aún cuando Minera Alumbrera está anunciando su retiro, este fallo alcanzará a los responsables de la contaminación, porque se la considera como un delito continuado».