Tiburcio Fernández, titular del gremio en la provincia, dialogó con TN24.com.ar sobre la situación de los trabajadores, la paralización de la obra pública y su incipiente reanudación por estos días. «Hemos llegado a tocar fondo», dijo por los despidos.
Es públicamente conocido el rol de privilegio que tuvo la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (UOCRA), preponderante, durante los gobiernos de Néstror Kirchner y Cristina Fernández. El polémico secretario general, Gerardo Martínez, fue uno de los más cercanos del matrimonio presidencial y la obra pública floreció, con aciertos, errores y delitos de corrupción en todo el territorio nacional.
Ya en 2015, antes del cambio de gobierno, la situación había empezado a cambiar para peor. Con la asunción de Mauricio Macri la caída en el sector de la construcción se acentuó. Solo en Chaco la mitad del total de trabajadores reconocidos por la UOCRA perdió su empleo, unos 7.500, según Fernández.
Ahora, con ocho meses de gestión de Macri al frente de la Argentina y un toma de crédito del gobierno provincial para reactivar la obra pública, «la situación empezó levemente a mejorar», dijo el sindicalista chaqueño.
«Gerardo Martínez, la Cámara de la Construcción y el Ministerio de Obras Públicas de la Nación hicieron una comisión de seguimiento y en el Chaco se vio la decadencia de la obra pública, una paralización total, entonces reconocieron que se deben terminar», explicó y adelantó que «el mes que viene, con una partida importante, las empresas van a empezar a tomar auge y así terminar lo que se empezó, en todo tipo de trabajos».
De todas maneras, Fernández dijo también que solamente está en actividad el Gasoducto y algunas obras más chicas, como las de la Ruta 16 que segurá hasta fin de año con aportes de Vialidad Nacional, los trabajos en el acueducto de El Impenetrable, la construcción de barcazas en Las Palmas y algunas obras en Roca, pero que no alcanzan para cubrir la cantidad de trabajadores que nuclea el sindicato.
Por eso, el titular de la UOCRA en el Chaco se adelantó y remarcó que hay que tener en cuenta los tiempos en el área de la construcción. Afirmó que solo quedan prácticamente dos meses de trabajo a toda marcha y que luego decae la actividad hasta enero o febrero.
«Esperamos que la situación no sea tan desagradable a principios del año que viene, porque éste sí lo fue», lamentó y pidió que se cumplan las promesas de campaña.
Despidos y Conciliación Obligatoria
Fernández también hizo mención a los despidos, algo inevitable, porque los trabajadores del área sufrieron la pérdida de sus puestos de trabajo y lo siguen haciendo. Como ejemplo expuso lo que se vivió en dos obradores que fueron tomados por la UOCRA en la provincia, como protesta por amenazas de despido que hicieron las patronales.
«El jueves tomamos dos obradores para no permitir los despidos de los trabajadores. Por eso nos llamaron a Conciliación Obligatoria y acordamos seguir conversando el 1 de septiembre, fecha en la que vamos a buscar la vuelta para que no echen a la gente», informó.
