La situación actual del país, claramente difícil en lo económico y social, repercute sobremanera en la mayoría de las provincias del territorio nacional. En lo que va del año, varias decidieron el endeudamiento, como es el caso de Chaco.
Los ingresos en las provincias dan señales de alerta, puesto que ante esta evolución de sus ingresos habituales, surge claramente la necesidad de echar mano a otros recursos para enfrentar sus gastos comprometidos, en la medida en que los mismos mantengan la dinámica creciente de los últimos años.
A esta situación se le adiciona la tendencia general al déficit financiero de las provincias, que no les permitió ahorrar recursos en épocas de expansión para aplicarlos en situaciones como la actual.
Resulta claro que la alternativa del endeudamiento está nuevamente vigente, y ha sido utilizada por muchas jurisdicciones en lo que va del 2016.
No obstante, resulta de importancia la búsqueda de consenso hacia el desarrollo de instrumentos de política fiscal subnacional contracíclicos, que permitan garantizar un financiamiento estable de políticas fiscales provinciales responsables; y no el condicionamiento financiero a las posteriores administraciones.
Según el último informe Instituto Argentino de Análisis Fiscal, con el segundo semestre del año en marcha, se analiza la evolución real de las principales fuentes de ingresos de los gobiernos provinciales en los primeros siete meses de 2016. En gran parte de las jurisdicciones del país la disponibilidad de recursos se ha visto deteriorada medida en términos reales, resultado de una combinación entre caída de actividad, que afecta la recaudación de provincias y los fondos coparticipados, y la inflación prevaleciente en el periodo, que merma el poder adquisitivo de cada peso recaudado.
Recaudación propia
A lo largo de los primeros siete meses las provincias han presentado un panorama de deterioro continuo de la recaudación. Consecuencia de la aceleración de la inflación observada en la primera mitad del año y la caída de la actividad privada, las recaudaciones han mostrado una contracción real promedio de 0,3%, resultando insuficientes las modificaciones tributarias realizadas a fines de 2015. El caso de mayor deterioro de ingresos lo constituye la provincia de Formosa, cuya recaudación cayó, en términos reales, un 8,6%.
Crecimiento real de la recaudación de provincias
Las provincias de Formosa, Entre Ríos y Jujuy han sido las que mayor contracción de la recaudación real mostraron. En la primera se observa una caída de todos los rubros de impuestos, existiendo una mayor profundidad en la contracción de Sellos (39,6%) e Inmobiliario (13,6%), mientras que en Ingresos Brutos la merma fue de 3,4%.
En Entre Ríos la baja en la recaudación de Sellos rondó el 12,8%, mientras que Ingresos Brutos mostró una contracción de 6,1% en términos reales. Sin embargo, el Impuesto Inmobiliario y el Impuesto Automotor muestran un crecimiento real de 2,4% y 7,5% respectivamente.
El posicionamiento de provincias con mayor caída real de recaudación se completa con Jujuy, cuyos ingresos se contrajeron 3,4%, impulsados por la merma de Ingresos Brutos (-5,7%) y del Impuesto Inmobiliario (-7,3%). En esta provincia, a diferencia de las anteriores, se observa un crecimiento de la recaudación del Impuesto a los Sellos (6,9%).
En la posición opuesta se encuentran las jurisdicciones de Neuquén y Río Negro, las que mayor avance han mostrado a lo largo del año, con crecimientos reales de 2,7% y 1,8% si se compara con 2015.
En estas provincias el tributo que más crecimiento ha mostrado en términos reales ha sido Ingresos Brutos, que para Neuquén avanzó 9,4%, mientras que en Río Negro lo hizo 3,1%. En ambos casos existió a principios del año una suba de la presión fiscal provincial. En el caso de la primera de las provincias, ocurrió un incremento del mínimo general (entre 30% y 40%), conjuntamente a la suba y creación de nuevas alícuotas que afectan en general a todos los tramos de facturación. Por su parte una de las principales políticas tributarias de Río Negro consistió en una disminución de los beneficios de promoción industrial, paralelo a un aumento de la alícuota para los contribuyentes de mayor facturación.
Coparticipación federal
En el transcurso de los primeros siete meses del año los ingresos reales por coparticipación han caído en casi todas las provincias analizadas, consecuencia de la contracción o bajo crecimiento observado en los principales impuestos coparticipables, Ganancias (-14,4%), Bienes Personales (-13,3%), IVA (+1,6%). La excepción la constituyen Córdoba y San Luis, en las que hubo incrementos de 6,2% y 9,6%
respectivamente, explicado por la suspensión de las retenciones del 15% de la pre-coparticipación1. En el resto de las provincias, la contracción real de la coparticipación se ubica entre el 5,0% y el 6,7% por lo que, en conjunto, la caída real promedio es de 3,5%. El caso de Buenos Aires merece una mención particular, dado que su menor caída real responde a que se encuentra excluido de gran parte de los fondos complementarios provenientes del impuesto a las Ganancias, lo que frente a la situación de caída de la recaudación de dicho impuesto, lo ha cubierto de obtener mayores descensos en el total de los fondos que recibió por la vía de la coparticipación.
Crecimiento real de la coparticipación a provincias
Como contrapartida, si se analiza el equivalente discrecional de la coparticipación, es decir las transferencias corrientes a provincias provenientes del gobierno nacional, resulta notorio el crecimiento que han tenido, mostrando a julio un crecimiento real de 43,7%. Sin embargo, con la información oficialmente disponible, no es posible discriminar qué provincias fueron beneficiarias del incremento de dichos envíos no automáticos.
Si se consideran en conjunto todas las transferencias corrientes a provincias (es decir, la suma de las automáticas y no automáticas), estos rubros han tenido un crecimiento real de 22%.
Fondo Federal Solidario
Por su parte, el Fondo Federal Solidario (FFS)2 tampoco escapó a los efectos de la inflación ya que tuvo una caída real de 2,7%. La evolución de estos fondos es exactamente la misma para cada una de las jurisdicciones, puesto que son envíos automáticos de un monto que se reparte según los coeficientes fijos de la ley de coparticipación vigente.
El notable incremento de la liquidación de divisas del complejo sojero, sobre todo en el primer cuatrimestre de este año, permitió que el FFS crezca entre enero y julio un 30,4% en términos nominales y en comparación a igual periodo del año pasado; pese a lo cual el incremento fue más que compensado por el aumento de precios.
De manera relacionada, y en lo referente a fondos enviados desde la nación a las provincias con destino a obras de capital, resulta relevante destacar lo ocurrido con las transferencias de capital no automáticas hacia el nivel subnacional, que en el acumulado de este año hasta julio han caído un 50% en términos reales (aquí cabe nuevamente recordar la limitación en el análisis, ya que con la información oficialmente disponible, no es posible discriminar la dirección que tuvieron estos fondos). En conjunto, la suma de los envíos de capital automáticos y no automáticos de nación a provincias ha mostrado una contracción de 38,1% en moneda constante.
Ingresos provinciales habituales
Consolidando los ingresos provinciales provenientes tanto de la Recaudación propia, como la Coparticipación recibida y los envíos del Fondo Federal Solidario es posible analizar la evolución de los principales recursos que disponen habitualmente las provincias para las que se cuenta con información desagregada.
Como se mencionó, los fondos provenientes de la Coparticipación Federal de Impuestos, que son el principal recurso con que cuentan la mayoría de las provincias, mostraron en el transcurso de de los primeros siete meses del año una contracción promedio del 3,5%, análoga a la caída de recursos provenientes del Fondo Federal Solidario. A su vez, la recaudación propia de las provincias, una vez que se la mide en moneda constante, no ha mostrado un comportamiento alentador y en promedio se contrajo 0,3%, con casos extremos como Formosa (-8,6%).
Crecimiento real de los ingresos habituales de provincias
En conjunto, los ingresos habituales de las provincias han mostrado una merma real de 2,1% en comparación a 2015. Las excepciones a esta situación la constituyen San Luis y Córdoba, que crecen 6,8% y 3,5% respectivamente, mientras que Formosa, la jurisdicción con mayor caída, presentó una contracción de 6,4%.