Una joven asesinada en La Rioja por un ex policía no murió por un disparo accidental, como dijo el agente que en ese momento era su pareja, sino que fue quemada vida, advirtió en el juicio un perito forense, por lo cual el fiscal pidió agravar la acusación.
El cuerpo de Romina Ríos (18) fue hallado quemado en febrero de 2015, en las afueras de la capital riojana, tras lo cual fue detenido el agente de policía Pedro Ortiz, que actualmente tiene 19 años.
Este jueves por la mañana, durante una audiencia del juicio, el médico forense que tuvo a su cargo la autopsia,José Luis Díaz Brizuela, declaró que la joven fue quemada cuando aún estaba con vida, más de 24 horas después de haber sido baleada, envuelta en un nailon y tirada en un descampado próximo a la avenida circunvalación, en el sur de la ciudad de La Rioja, donde luego fue encontrada.
Ante esto, el fiscal Gustavo Zalazar pidió el cambio de carátula por femicidio con alevosía, agravado por haber sido cometido por un policía. Díaz Brizuela dijo que la víctima tenía “humo negro en sus pulmones” y otras huellas que evidencian que murió “por calcinación”, ya que Ortiz, más de 24 horas después de haberla tirado, volvió al lugar para rociarla con combustible y prenderla fuego.
El acusado era un nuevo integrante de la policía provincial cuando cometió el crimen. El lunes pasado, Ortizdeclaró en el juicio que la había matado por accidente, cuando estaba “bananeando” con su arma.
El ex agente dijo que quiso borrar todas las huellas, para lo cual envolvió a la joven y la trasladó en una moto con la cual pasó frente a la central de policía y a la alcaidía sin llamar la atención, pese a que vestía una remera y estaba manchado de sangre.
Luego limpió la escena del crimen y dos días después volvió a quemar el cadáver, reveló el acusado. Lamadre de la joven manifestó: “Estoy mal, es muy duro… La quemó viva”.
InformeSalta/Crónica.