La extrema pobreza del salón donde dan clases los pequeños es una triste realidad de la comunidad, las madres de los niños ruegan porque las autoridades hagan algo al respecto.“Nuestros hijos vienen a clase a este lugar porque vivimos muy alejados de lo que es la otra escuela que está en el ingreso a nuestra Colonia, y como para que ellos no pierdan la oportunidad de estudiar es que nosotros acompañamos a la docente que vienen hasta este lugar, y tratamos de con lo que tenemos poder cocinarles y cuidarlos”, expresaron las madres de los alumnos.
Un salón abandonado
Las condiciones del lugar donde se dicta clases son de extrema precariedad. Las ventanas, al no tener vidrios, son tapadas con cartones para no sentir el frío en épocas invernales. Lamentablemente, el baño está a medio hacer y el agua debe ser traída desde más de dos kilómetros, debido a que la que provee el aljibe más cercano está sucia.
“Sabemos que no están dadas las condiciones para que ellos puedan tener una buena clase, pero queremos que ellos se capaciten. El trabajo que hacen los docentes es muy bueno, pero el edificio no ayuda”, cuentan las madres de los alumnos, las cuales piden que se tenga en consideración a estos chicos que pese a todas las limitaciones vienen todos los días a clase, en busca de superarse.
Fotos: Gentedepueblo.com