Donald Cline, de 77 años, está acusado de ser el padre biológico de al menos ocho personas. Ya hay pruebas de ADN que lo comprometen.
Un médico especialista en reproducción inseminó con su propio esperma a por lo menos 50 mujeres en su clínica en la década del 70. Ahora, los hijos de sus pacientes buscan conocerse.
Todo salió a la luz cuando una joven de Indianápolis, lugar donde ocurrieron los hechos, se enteró de que sus padres fueron a una clínica de fertilidad para poder tenerla. Cuando se hizo la prueba de ADN en una empresa privada de análisis la aseguraron que el padre era el mismo que el de otras ocho personas.
Cline reconoció que había hecho esto porque en su clínica escaseaba el esperma, pero aseguró que solo eran suyos seis hijos y no los ocho que apuntaban las pruebas de ADN.
Durante el juicio en su contra, confesó que había obrado mal y pidió perdón a Dios por sus actos. Lo cierto es que los expedientes de estos pacientes están destruidos debido a que la ley del estado obliga a guardar los expedientes durante siete años.