El caso se conoció luego de que la adolescente fuera llevada por su madre a un centro de atención primaria de la salud.
En una comisaría de una ciudad ubicada alrededor de 100 kilómetros al sur de San Miguel de Tucumán, un médico de un centro asistencial denunció que atendió a una adolescente de 13 años que presentaba signos de tener un embarazo.
La menor fue llevada por su madre al centro de salud. Ante la duda, el médico le entregó material para que que se le hiciera a la nena un examen domiciliario para constatar el embarazo. Ambas se retiraron, retornaron a las 18 y mostraron que el test había dado positivo.
Ante la evidencia, la menor confesó que su hermano de 15 años habría abusado de ella dos meses atrás cuando se encontraban solos en la casa y nunca lo había contado, hasta ayer.
La fiscalía de turno intervino y ordenó que personal policial se dirigiera al domicilio en donde habría ocurrido este hecho. En diálogo con los agentes, los padres de los menores informaron que no harían ninguna denuncia.Frente a ello, no se dispusieron medidas en contra de los chicos.
LaGaceta/InformeSalta.
