El titular de la Federación Económica del Chaco, Sergio López, aseguró que solamente el 1% de los productos adquiridos en ciudades limítrofes paga impuestos. «Este contrabando hormiga perjudica a la economía y el empleo argentino», dijo y se sumó a la preocupación que habían mostrado desde la Cámara de Empresarios.
El comercio fronterizo entre ciudades argentinas y de países limítrofes solamente registra un 1% de compras que pagan impuestos, por lo que algunas entidades empresariales, como la Federación Económica del Chaco, alertan que esto constituye contrabando hormiga y daña a la economía y al empleo nacional.
«No es un problema que tenemos en Posadas o en Formosa sino en todas las ciudades fronterizas del país» y que «sólo el 1% paga impuestos por las compras», sostuvo el directivo de la Federación.
El empresario sostuvo que «a la vista de todos, y a diario, (muchos) argentinos cruzan hacia Uruguay, Brasil, Paraguay, Bolivia y Chile para realizar compras ilegales y eso es contrabando».
«Creo que no se trata de merituar el delito por el volumen de la compra y que todos debemos estar atentos a un problema que no sólo es del gobierno de turno sino que es de toda la sociedad», consignó.
López sostuvo que el fenómeno «es multicausal» y que «tiene que ver con la política macroeconómica porque la presión tributaria para empresas es del orden del 45 por ciento y transforma a la producción en nada competitiva».
A su vez marcó que «el costo laboral en el comercio es del 65%. Un empleado que percibe $ 12.000 de salario de bolsillo al empresario le cuesta 20.000 pesos. Es evidente que hay impuesto al trabajo».
El titular de la entidad empresaria dijo que «es claro que así no se puede competir con el costo laboral que tienen países vecinos donde por esta razón, entre otras, todo es más barato y hasta (los mismos) productos argentinos» que se pueden comprar en comercios limítrofes.
A la vez consideró que «gran parte de esto tiene que ver con la duplicación del empleo público y de un Estado nacional que entre 2003 y 2015 pasó a pagar salarios, jubilaciones y otras asignaciones previsionales a poco más de 20 millones de personas».
«Es necesario que el gobierno nacional deje de mirar sólo hacia el puerto de Buenos Aires porque en el interior del país hay desventajas comparativas que hacen que sea más difícil sostener las unidades productivas y, por lo tanto, el empleo», añadió.
López entendió que «no se pueden tomar medidas aisladas» y que «se deben controlar las fronteras, tener políticas tributarias diferenciadas para empresas de zonas como el NEA».
A esto le sumó el reclamo «para ordenar otras variables de la economía para empezar a poner en marcha la economía, que todavía no arranca, para crear empleo privado registrado».
Por ello pidió «no demorar la definición de otras medidas económicas para asegurar las inversiones que se demoran esperando señales que el gobierno aún no las dio».
Para el titular de la Federación Económica de Chaco «la informalidad laboral es un tema a tener en cuenta porque en Capital Federal es del 10 al 20%, en provincias como la nuestra del 30 ó 40% en las capitales y en lugares como El Impenetrable llega al 90%».
«Esto es injusto para el empleado que no tiene obra social ni aportes jubilatorios y también es injusto para el empresario que paga frente a quien teniendo la posibilidad de hacerlo no lo hace ante un Estado que está permitiendo que se mantengan estas situaciones», señaló.
