Las aguas parecían haberse calmado semanas atrás cuando, en medio de la espera por la resolución definitiva de su divorcio, Angelina Jolie y Brad Pitt habían llegado a un acuerdo temporal: la actriz tendría la custodia física de sus seis hijos y el actor, el derecho a visitas supervisadas. Sin embargo, el acuerdo se quebró porque Brad, al finalizar las tres semanas que se habían estipulado para dichas visitas, decidió contraatacar con el pedido de la custodia compartida.
Angelina había solicitado el divorcio súbitamente el 20 de septiembre, tan solo unas horas después de que se produjera un incidente en un avión en el que Brad se habría puesto violento con Maddox, el hijo mayor de la familia. La publicación PEOPLE asegura que debido a las notorias discrepancias que mantienen en relación a la crianza de sus hijos, Pitt no habría tenido otra opción más que la de pelear por la custodia compartida. Mientras tanto, los niños permanecen con su madre y ni Angelina ni Brad se comunican de manera directa sino a través de sus respectivos abogados.
Por otro lado, Pitt también comunicó que cancelará toda clase de promoción vinculada al estreno de Aliados, la película que co-protagoniza con Marion Cotillard , originalmente considerada la tercera en discordia en el divorcio de la ex pareja dorada de Hollywood.