La información causó revuelo en la jornada de hoy tras la difusión de una posible contaminación en el agua potable. Sameep negó que eso suceda, y en las últimas horas hizo lo propio la institución académica.
La Universidad Nacional del Nordeste aclaró puntos sobre la información que recorrió las redes sociales y que anunciaba la contaminación del agua potable con una bacteria conocida como Legionella. Desde la casa de altos estudios afirmaron que se realizó una investigación en distintos domicilios de Resistencia, buscando esta bacteria debido a que «en muchas partes del mundo se registraron brotes de la misma y los investigadores no tenían conocimiento de su existencia en Argentina ni en la región ya que no había registros. Además aparecieron algunos casos de pacientes y quisimos que los médicos puedan estar alertados de que esta bacteria existe en nuestro medio».
Asimismo, agregaron que que los especialistas no estudiaron la calidad del agua potable que proveen las empresas potabilizadoras Sameep y Aguas de Corrientes, y que lo que hicieron fue «estudiar el agua que baja de los tanques domiciliarios, responsabilidad absoluta del dueño del tanque que debe higienizar y mantener el reservorio de agua que llega al domicilio».
«En muchísimas casas los tanques no tenían tapas o estaban rajadas y eso provoca que palomas, roedores o insectos se metan en el tanque o que el mismo viento arrastre hojas y polvo», explicaron desde la UNNE.
Además detallaron que la bacteria «tiene predisposición por crecer en sitios húmedos. Puede encontrarse en los tanques, ya que es un lugar para desarrollarse».
«Eso es lo que encontramos en la mitad de los domicilios estudiados, donde también vimos que el cloro residual era muy bajo», añadieron.
Expertos de la universidad dijeron que «esta bacteria podría llegar a producir enfermedad en personas suseptibles, que tienen un problema predisponente para poder adquirir esta enfermedad que es una especie de neumonía». «Esta infección se produce por inhalación, uno tiene que respirar la bacteria, es decir que puede estar en el agua, uno puede tomarla y puede que no le pase nada», aseveraron.
Finalmente, sentenciaron: «Queremos llevar tranquilidad a la gente, esto no es ninguna alerta. La gente se está preocupando por una información que circula en las redes sociales y es falsa porque en ningún momento se recomiendó que no se tome el agua. Si hubiéramos tenido algún dato alarmante, los primeros que lo hubiesen sabido iban a ser las autoridades de Salud Pública».