Organizada por la Cámara Empresaria de Desarrolladores Urbanos de la región (CEDU-NEA), y con una completa disertación del Arq. Fabio De Marco, se llevó a cabo la “Conferencia de Planeamiento Sostenible, Reconversión de Áreas Urbanas y Gestión Público-Privada” en el auditórium de la FAU (Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la UNNE). La misma pretende motivar en la provincia proyectos que recuperen espacios en desuso, devolviéndoles identidad, y generando así nuevos sitios ambientalmente sustentable y económicamente viables para la población y la industria.
El ministro de Desarrollo Urbano y Ordenamiento Territorial, Guillermo Monzón, participó del panel de opinión, donde junto a otros funcionarios, debatieron la situación actual del Chaco sobre esta temática en particular.
La tarea profesional de De Marco se nutre de importantes experiencias en el ámbito público y privado, en las que se ha especializado en procesos estratégicos de desarrollo de ciudades, diseño urbano y arquitectura de escala. Durante la jornada presentó los trabajos realizados en la Isla Demarchi de Buenos Aires, el Paseo de la Costa de Neuquén y los puertos de Santa Fe y Asunción del Paraguay; estos casos son claros ejemplos de reconversión urbana en los que se tomaron lugares que se encontraban en desuso, resignificándolos a través de la edificación y el rescate de espacios verdes, para así devolver a los sociedad espacios que estaban ociosos.
El arquitecto De marco plantea que para que los emprendimientos tengan éxito se debe “tomar el sitio y empezar a vivirlo” antes de que aparezcan las inversiones públicas o privadas. Esto quiere decir que, a través de estímulos colectivos como pueden ser los eventos culturales, se invita a la población a interactuar con el espacio y así agregarle valor. “La ocupación del lugar genera identidad en él” afirma De Marco, y agrega que la misma “transformación de la tierra provoca una transformación social”.
Luego de la exposición de De Marco se realizó un panel de debate integrado por el ministro Monzón; Rubén Sinat, presidente de CEDUNEA; la intendente Alicia Azula (Barranqueras); el arquitecto Miguel Barreto (decano de Arquitectura, Diseño y Urbanismo – UNNE); y Arq. Alejandra Maro, quien actuó de moderada. En el mismo, los panelistas se manifestaron a favor de los emprendimientos planteados por De Marco, y dieron sus puntos de vista sobe la temática tratada.
El decano Barreto destacó que sea el sector privado quien tenga la iniciativa de “hacer pedagogía en la región” sobre estos nuevos modelos de gestión urbana; añadiendo que le parecía sumamente oportuno que la casa de altos estudios (por la Facultad de Arquitectura) sea la elegida para este tipo de eventos. Por su parte, la intendente Azula aprovechó la oportunidad para mencionar su satisfacción en cuanto al trabajo articulado que mantiene la Intendencia de Barranqueras con el Ministerio de Desarrollo Urbano, “trabajando en conjunto para buscar solución a la situación dominial” de dicha ciudad.
Con respecto a esto, el ministro Monzón explicó que el gobierno tiene en claro la importancia de la articulación entre los sectores públicos y privados para el desarrollo de espacios urbanos de calidad, “que son los que identifican y estructuran una ciudad, que generan vida y le dan identidad”, expresó. “Por eso mismo, hace años que el ministerio gestiona su herramienta de ordenamiento territorial, la cual se encarga del proceso de regularización dominial que es el primer paso para poder emprender una planificación y pensar a lo grande. Hay que empezar por la base, que es tener la situación del suelo regularizada”. Enunció.
Además, mencionó una experiencia de esta índole ejecutada en la ciudad de Resistencia, que fue el caso de la laguna Prosperidad. Allí, por medio de una Intervención Urbana Integral realizada por la SUOPE (Sub Unidad de Obras y Programas Especiales) cuando Monzón era Jefe Ejecutivo, se logró reasentar a 207 familias que habitaban a orillas de la laguna y se encontraban bajo riesgo hídrico, y crear para ellas el nuevo barrio Don Bosco.
La obra contó con la ejecución de una estación de bombeo que impide definitivamente que la zona se inunde cuando sube el nivel del agua, pavimento y desagüe pluvial, red cloacal, y un parque urbano de 30.000 m² con plazas y muelles para la recreación de los habitantes.
Por último, Rubén Sinat destacó el rol de los desarrollistas privados y su compromiso con la ciudad al brindar eventos de esta índole.
