Así lo expuso la Asociación Forestal Argentina (Afoa), tras la realización de su último seminario llevado a cabo en Corrientes en los últimos días.
Osvaldo Vasallo, presidente de Afoa, detalló los problemas y las expectativas que tiene la actividad en la región. Hizo lo propio Claudia Peirano, directora de la entidad, quien brindó información sobre el tema en diálogo con el Diario La Nación.
Consultada sobre las acciones de la industria en el país, particularmente en el NEA y en comparación con países limítrofes, Peirano expresó: «En Brasil, Uruguay y Chile forestan por un objetivo, nosotros, lo poco que forestamos lo hacemos por entusiasmo. En China, una empresa foresta 300.000 hectáreas por año sólo para mitigar las barbaridades que hicieron en contaminación. Si se genera una agenda, podemos delinear un futuro forestal».
Asimismo, dejó en claro que el objetivo a priori que tiene el sector en la Argentina es el de atraer inversiones, para que de esa manera se pueda desarrollar mucho más a la industria. «En el seminario surgieron temas como el de las energías renovables, la construcción de viviendas y la foresto-ganadería. Creo más en estos rubros que en la celulosa y el papel propiamente dicho. Este segmento tiene un castigo social injusto por el blanqueo de pulpa. Además es una inversión muchísimo más grande que la fabricación de viviendas de madera o un sistema silvopastoril masivo», agregó.
Sobre las construcciones de viviendas de madera, Peirano explicó que «el Gobierno le quiere dar un impulso muy fuerte, busca que el diez por ciento de la construcción de viviendas sociales sea hecho con madera. Lo que pedimos es que haya la mayor certificación posible para evitar las malas experiencias anteriores. Pretendemos que el material que se utilice sea certificado, lo mismo que el personal que trabaje en él».
