«Era un viaje de despedida de mi nena como hija única», dijo el hombre. Su esposa está embarazada.
Leandro Berno, el padre de la niña de 9 años que murió ahogada en una pileta de un parque acuático de la ciudad brasileña de Foz de Iguazú, contó hoy que había decidido hacer el viaje a ese centro recreativo como «despedida de hija única», ya que su mujer está embarazada de seis meses.
El hombre reiteró que en lugar «no había absolutamente nada» de ayuda en materia de emergencias, al sostener que estuvieron «totalmente descuidados y abandonados». Carola Berno falleció ahogada el viernes pasado cuando su cabello fue absorbido por el desagüe de una pileta del complejo Acquamania, cuando estaba junto a sus padres.
«Decidimos ir a Foz de Iguazú porque mi mujer está embarazada de 6 meses y medio, y era como el viaje de despedida de mi nena como hija única. Los hijos únicos son muy absorbentes, que no quieren hermanitos, así que fuimos», expresó Berno en diálogo con radio Mitre.
La tragedia
El hombre detalló que los cabellos de su hija «estaban enroscados en el filtro de succión de la pileta».
«Éramos dos tratando de sacarla, no podíamos, se tuvo que tirar al agua otra persona. Arrancamos el filtro de la pileta entre los tres. Luego la subimos y empezamos las maniobras de reanimación», recordó.
Añadió: «La gente pedía por un médico, no había médicos, le hacíamos masajes cardíacos… vino una persona en una moto con un desfibrilador que apoyó en el piso y no lo utilizó».
«Pasó mucho tiempo más y llegó la ambulancia. No nos dejaban acceder a la unidad hasta que nos peleamos y logré subir yo. En el hospital mi nena quedó en terapia intensiva y en la recepción lo único que estaban interesados era que yo tuviera tarjeta de crédito para cubrir los gastos médicos», indicó.
Berno comentó que a él y a su esposa «no» los dejaron entrar a terapia intensiva. «Realmente fue una situación muy tremenda, dolorosa y desgastante», recalcó el hombre.
Sobre las medidas de seguridad en el parque acuático, Berno puntualizó: «No había absolutamente nada, no había nadie que pudiera apagar esa bomba (por el filtro). Nadie tenía conocimiento de las instalaciones, no había salvavidas».
«Trajeron un tubo de oxígeno que no funcionó nunca», agregó Berno, quien enfatizó: «Estamos en una situación de duelo muy profundo». Carola, hija única del matrimonio, que reside en el Gran Buenos Aires, se encontraba en una pileta del complejo cuando su cabello fue absorbido por una de las bocas de desagüe.
Su padre, junto a un hombre brasileño y otro argentino lograron rescatarla y le hicieron maniobras de reanimación. La nena fue trasladada luego al Hospital Costa Cavalcanti de Foz de Iguazú, donde fue ingresada a terapia intensiva, pero murió unas dos horas más tarde.