Hace pocos meses, un comerciante tucumano debió cambiar el nombre de su sandwichería luego de que Sergio Agüero intimara al dueño por ponerle de nombre El Kun a su local. Finalmente, el comercio pasó a llamarse «A mí nooo». Vale aclarar que para el comerciante, Agüero era su máximo ídolo futbolístico.
Pero la venganza es un plato que se sirve en frío y, todavía dolido por aquel episodio legal, el comerciante salió a defenestrar la última actuación del delantero de la Selección argentina.
«Todo vuelve. Uno no cree en las brujas, pero que las hay las hay», dijo el comerciante al sitio Don Balón, en referencia a una especie de revancha con quien supo ser su ídolo.
«Él debería recapacitar con esa situación y encontrarse consigo mismo… en una de esas lo ayuda. Yo no necesito que la sandwichería se llame como él, son costos que tuve que afrontar, y para la estructura económica mía afectó mucho. No creo que a él le pase lo mismo, debería ver la parte humana», disparó el hombre, aún enfurecido con el jugador del Manchester City.
«En su momento no podía creer lo que me estaba pasando con mi ídolo. No me entraba en la cabeza que le haga un juicio a una pequeña sandwichería de Tucumán», concluyó.
