Es a raíz de los datos que aportó el Conicet, y en los cuales se registraba la existencia del químico en el agua. También la Prefectura Naval Argentina había encontrado restos.
César Vallejos Tressens, defensor del Pueblo de Corrientes, elevó pedidos al Gobierno Nacional para que confirme, o no, la presencia de restos químicos de glifosato en el río Paraná. Todo esto no se debe a caprichos del funcionario correntino, sino que el propio el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas lo comprobó en estudios realizados este año, al igual que el descubrimiento que hizo la Prefectura.
El herbicida es mundialmente conocido, y en muchos lugares -como en la Argentina- se utiliza para eliminar las malezas y hierbas en los campos con el objetivo de permitir el crecimiento libre de cultivos específicos como, por ejemplo, la soja.
Cabe destacar que hace varios años se vienen realizando estudios científicos y médicos en relación al glifosato, y la Organización Mundial de la Salud advirtió sobre sus posibles propiedades cancerígenas para seres humanos y animales.
Vallejos Tressens hizo un pedido de informe al Instituto Correntino del Agua y el Ambiente (Icaa), al Ente Regulador del Agua de la provincia de Corrientes, y al Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación, para que se expidan sobre el tema. Hizo lo propio con el Ministerio de Salud correntino, al que pidió que se comuniquen enfermedades relacionadas al uso de agroquímicos en el último tiempo.
