Fernando Blanco y Marga Garau, padres de Nadia, gastaron la plata en bienes de lujo.
Fernando Blanco y Marga Garau recaudaron 1 millón de dólares para pagar un tratamiento médico para su hija Nadia. Lo lograron acudiendo a canales de televisión y realizando colectas solidarias por redes sociales. Pero en lugar de utilizar la plata para su hija, gastaron el dinero en bienes de lujo. Y fueron detenidos por estafa.
La familia Blanco Garau es oriunda de España y el caso, denominado «Caso Nadia», conmueve a ese país. Celebridades como el cantante Alejandro Sanz y varias empresas locales habían apoyado la causa. Luego de un artículo del diario El País, que señalaba inconsistencias en la historia de Nadia, los padres fueron detenidos.
Luego de la publicación del artículo, fuerzas de seguridad realizaron una investigación sobre los padres de Nadia. La investigación concluyó que «serían presuntos autores de un delito de estafa, como se desprende de los estudios de los movimientos bancarios y de diversos testimonios del caso».
La policía apuntó que de los 918.000 euros (968.000 dólares) que obtuvieron a través de donativos, los padres gastaron 600.000 sin que la niña, que hoy tiene 11 años, fuera sometida a ninguna de las intervenciones médicas para las que estaban destinadas las donaciones.
En el registro de la vivienda familiar, los agentes encontraron «1.845 euros en efectivo, 32 relojes de alta gama valorados en 50.000 euros, una estilográfica, un ordenador, tres tabletas electrónicas y tres teléfonos móviles, todos de alta gama, además de marihuana», destaca el comunicado.
El alquiler del apartamento, que alcanzaba los 9.800 euros anuales, se pagaba con los fondos de la asociación. También se descubrió un pago a una empresa de automoción de 24.500 euros.
Nadia padece Tricotiodistrofia, una enfermedad rara llamada «de piel de serpiente». La dolencia le ocasiona a la nena trastornos propios de una anciana, como cataratas, cansancio, dificultades para hablar y que camine con las piernas torcidas.