La “Directora virtual” del hospital de Castelli que solo trabaja dos días

Interior

En un año crítico para el sistema sanitario, con un precario funcionamiento, demasiadas falencias y malas decisiones, la ministra de Salud, Mariel Crespo, vuelve a estar en el foco de atención.
La Salud Pública de la provincia atraviesa una de sus etapas de mayor crisis en la atención que brinda a la población. Su funcionamiento refleja a diario una gran desorganización que no logra salir a flote. Faltas de insumos, paro de médicos, renuncias de directivos, roturas edilicias, promesas que nunca se concretan, demuestran el poco compromiso del gobierno provincial con la salud pública en general.

 

El pasado 8 de diciembre, Crespo había designado a la nueva cúpula Directiva del hospital del Bicentenario “General Güemes”, integrado por Andrea Cruz como directora ejecutiva, Damián Vargas González a cargo de la codirección Médica y Cristian Segovia de la codirección de Servicios Técnicos. Asimismo, se designó como nueva responsable de la Región Sanitaria V “El Impenetrable” a Silvia Fabbro, quien reemplazó a Daniel Morales.

Esta designación había sido – según los dichos de la Ministra de Salud – para “optimizar el desempeño asistencial y que el hospital pueda funcionar en más del 50 al 70 por ciento de su potencial operativo”.

Sin embargo, llamativamente, la nueva directora, ya es famosa por su “ausencia”. Conocida como “la Directora virtual”, ya que sólo trabaja dos días en la semana.
Pero eso no es todo. Andrea Cruz reside en Corrientes, y cada lunes una camioneta del hospital la busca, y la lleva de regreso a su provincia los miércoles; es decir que la Ministra, intenta que una persona que trabaja solo dos días logre la “optimización” en la asistencia sanitaria.
Cabe resaltar, que mientras muchos hospitales denuncian la falta de combustible y unidades para atender emergencias, la nueva directora tiene móvil con chofer propio, con combustible cada semana y es muy poco probable que lo pague de su bolsillo.
Esta es una muestra más de la incoherencia en las decisiones. Cada mala inversión, cada mala decisión, irá profundizando el deficitario sistema.
Es hora de que la Salud deje de ser un mero discurso y publicidad del Gobierno para pasar a ser una “prioridad”.