La aberrante historia implica a seis hermanos, de las cuales dos eran violadas por su primo.Sucedió en la ciudad de Monte Quemado, donde según el expediente los hermanos se encontraban bajo la custodia de una tía hace cuatro años, dado que el padre trabajaba en un campo lejano y la madre falleció al dar a luz al último de los hijos.
Desgarradores testimonios
La hermana de ocho años, contó que una noche la levantaron de su cama y la metieron en el baño, todo esto a manos de su primo quien tapo su boca en todo momento. La niña comentó que esta se convirtió en una práctica habitual y que increíblemente ninguno de los otros siete adultos con los que convivía sospechó que algo raro pasaba, pese a que ella lloraba todas las madrugadas.
Al poco tiempo, el abusivo incluyó en sus actos de violación a la otra prima de tan solo 10 años de edad.
Tortura
El resto de los hermanitos también vivieron un calvario, obligados a caminar en puntitas de pie, recibiendo insultos y constantes reclamos por no aportar a la casa donde vivían. Para colmo de males, la tía los alimentaba en el último tiempo con comida para perros.
El fin de la pesadilla
Todo cambio una na mañana, cuando la maestra escuchó acerca del calvario de boca de una niña. Comunicándose inmediatamente con el padre, quien regresó del campo furioso. Retiró a sus hijos y los alojó en el refugio de Catalina Hornos (Añatuya), en el hogar «Haciendo Camino». Allí, una psicóloga advirtió sobre la posibilidad de abusos, los cuales fueron confirmados por los exámenes médicos.
Procedimientos judiciales
El juez José Luis Torrelio y la ex fiscal Ana María González mandaron tras las rejas al primo, por «Abuso Sexual con Acceso carnal reiterado». Hoy, es juzgado en la Capital de Santiago del Estero con la posibilidad de recibir pena de hasta 15 años de prisión. La madre del violador también fue detenida pero debido a la falta de pruebas debió ser puesta en libertad.
Teniendo en cuenta los testimonios de médicos y psicólogos, los alegatos y sentencia del juicio se conocerán en los próximos días.
Foto: imagen ilustrativa.
