Alberto Benítez, el «Dueño» de Villa El Dorado [VIDEO]

Sociedad

Andrés Ian Pérez denunció de manera exclusiva en TN24 que Alberto Benítez, encargado del Centro Comunitario de Villa Don Andrés, lo golpeó cuando pidió que quite su costosa camioneta del acceso a su vivienda. En tal sentido, brindó un video donde se ve claramente al agresor en pleno acto, y a quien sería su concubina incitando a Benítez a que le pegue al joven.

Ian Pérez contó que por el hecho, ya existen denuncias precedentes y del acto en cuestión que respaldan al video, donde se ve como Benítez estaciona su camioneta de gran porte frente al acceso de la vivienda del joven.

Incluso, la mujer Benítez, amenaza con hablar con gente poderosa para hacerle quitar el portón «porque le molesta».

¿QUIEN ES ALBERTO BENITEZ?

Alberto Benítez es un hombre de peso en Villa El Dorado, basando su poder en su cargo al frente del Centro Comunitario Villa Don Andrés, pero fundamentalmente por ser delegado del STM en representación de todos los CCM.

Según Pérez, a Benítez le pesan muchas denuncias en su contra, no solo de él sino también de otros vecinos, y la última, por las agresiones que se ven en el video, es de caracter penal y fue realizada en el Juzgado de Paz del barrio Güiraldes.

 

EL TEMOR DE PEREZ

En el video se ve como Ian Pérez sale de su domicilio, y tiene estacionada la camioneta del vecino que justamente es el delegado del STM. Tras un intercambio de palabras, Benítez se le abalanza en varias ocasiones y lo golpea con un hierro, el cual lo sacó de su camioneta.

A raíz de esto, el joven denunció:

MI NOMBRE ES ANDRES IAN PEREZ, VIVO EN AV. SAN MARTIN 1876 ESQUINA FORTIN LOMA NEGRA, MI CASA TIENE 10,40 MTS. DE FRENTE Y 50MTS. DE COSTADO POR LOMA NEGRA. LA ENTRADA DE MIS VIEJOS ES POR EL COSTADO LA CUAL HACE MAS DE UN AÑO QUE NO SE PUEDE USAR PORQUE NI EL JUEZ ME GARANTIZA QUE ESTE TIPO NO VAYA A LASTIMARNOS… SE CREE EL DUEÑO DEL BARRIO.

La situación es compleja para la familia, ya que aseguran que a pesar de los derechos que poseen, ni siquiera la justicia se atreve a poner paños fríos a esta situación.