A poco más de un mes de la salida de Isela Costantini de Aerolíneas Argentinas, el nuevo presidente de la compañía Mario Dell’Acqua puso en marcha los motores para darle vuelo al plan de ajuste que le solicitaron desde la Casa Rosada.
El ajuste en AA comenzará por el cierre o mudanza de sucursales en país y el exterior y el desplazamiento de cientos de trabajadores.
Sucursal de Resistencia
La sucursal local de Aerolíneas en Juan B. Justo cerrará sus puertas y se fusionará con la sucursal de Corrientes. Son cinco los trabajadores que a diario ahora deberán trasladarse hasta la vecina provincia para trabajar y no perder su fuente de trabajo.
Trabajadores
Hasta mediados de 2016 Aerolíneas ostentaba una plantilla de 12.040 trabajadores en el mundo. Pero la “mesa chica” del gabinete económico que integran Marcos Peña, Mario Quintana y Gustavo Lopetegui exigió reducirla 25%. El argumento es conocido: déficit presupuestario. Costantini lo recibió apenas asumió, pero resistió su implementación a fondo y se fue. La misión del exTechint Dell’Acqua es clarísima. Desde ahora, insistirá con los retiros voluntarios y las jubilaciones anticipadas, aunque desde la aerolínea lo nieguen.
Durante la gestión de Costantini unos 800 trabajadores aceptaron indemnizaciones y dejaron sus puestos. En ese lote se despidieron históricos pilotos, mecánicos, administrativos y oficiales de venta.
Ante la consulta de ámbito.com, el gerente de Asunto Públicos de AA, Pablo Marcó, dijo que en la reunión de gerentes “no se habló de ninguna cifra” de despedidos “ni de un supuesto ajuste de planta”. “Eso es totalmente falso”, enfatizó.
Sucursales
Las sucursales que ya no operan o dejarán de hacerlo en el país son las de Bariloche, Puerto Iguazú, San Isidro y la de Cabildo y Congreso, que desde hace unos días ya cerró sus puertas. En Europa ordenarían bajar las persianas, mudarse o vender los muebles de las oficinas de Roma y Madrid. También podrían desactivar la atención al público por mostrador en algunas de las principales ciudades de América latina. “Generan mucho gasto en dólares”, se esgrimió en la reunión, con las planillas de costos en el exterior sobre la mesa.
Otra estrategia para reducir el déficit es unificar filiales, como con la de Resistencia y la de Corrientes.
Venta de pasajes
Hoy, el grueso de los pasajes se vende por la web o teléfono y argumentan que no se justifica el pago de alquileres o expensas por semejantes inmuebles. Se estima que en 2016 creció 10% la facturación total de boletos.