Este año, turistas indecisos y amantes de las ofertas decidieron sus destinos con muy poca anticipación. Por qué ocurre este fenómeno.
Un informe de Criteo, una consultora que lleva a cabo investigaciones de marketing a nivel mundial, había revelado hace unos meses que la gente alrededor de todo el mundo -especialmente los más jóvenes- está utilizando sus dispositivos móviles cada vez más para reservar sus vacaciones. Sus cifras detallan que durante los primeros cuatro meses del 2016, el 26% de los bookings se hizo a través de celulares. Y este número aumenta todavía más si se tienen en cuenta las reservas de último momento.
El mismo fenómeno se replica en el país. Según datos de AlquilerArgentina.com, la primera semana de enero cerró con un récord de reservas de último momento, las de los turistas indecisos o que especulan con descuentos de operadores locales antes de planificar sus vacaciones.
Históricamente, la reservas de la temporada de verano en Argentina se concretan entre octubre y diciembre, cuando los turistas definen cuáles serán los destinos a visitar, y de esa manera ganarle a la inflación. Sin embargo, la encuesta realizada por esta empresa reveló que este año los turistas indecisos esperaron hasta que pasara año nuevo para terminar de confirmar reservas, especulando con los precios y las ofertas que se comenzaron a ofrecer para competir con destinos como Chile, Uruguay y Brasil.
En su plataforma, la ocupación durante la primera semana de enero fue: en Carlos Paz del 70%, en Monte Hermoso del 80%, y en Villa Gesell y Bariloche del 70%, para dar tan sólo unas cifras. Los fines de semana estas reservas suben entre 10 y 20 puntos, llegando al 90% en la mayoría de los destinos.
Según el experto Eric Barbero, de la empresa que realizó este relevamiento, este fenómeno tiene varios motivos: «Por un lado, la falta de decisión de muchos turistas que este año no sabían si se iban a ir de vacaciones por el contexto económico, o aquellos que prefirieron esperar a que bajaran los precios locales, por la fuerte competencia con destinos como Chile, Brasil y Uruguay, hizo que se revirtiera la tendencia que históricamente los llevaba a reservar con tiempo para congelar precios. Hoy esperan las super ofertas de una temporada que venía baja».
