El ex subsecretario de Economía municipal Miguel Ángel Vilte señalo a los medios de prensa que “el Municipio de Resistencia debe pagarle al Club Municipales lo adeudado por las cuotas societarias y las de cancelación por la compra de bienes de consumo y durables porque hay una responsabilidad y continuidad institucional que el Intendente Jorge Capitanich no debe desconocer, como no se desconoció nunca las deudas que había dejado un Gobierno peronista y que equivalía casi a dos presupuestos.
Tanto al Club como al Sindicato se le debían, en 1999, más de un año de retenciones y el Intendente de turno se vio a obligado a pagar toda esa deuda con recursos provenientes de créditos con entidades financieras”.
“Capitanich el 10 de diciembre de 2015 asumió la Intendencia de Resistencia, cargo que implica un compromiso para administrar la ciudad durante cuatro años y no es correcto usar a los empleados municipales, socios del Club, como voceros de su ineficiencia. Nada puede justificar su falta de resolución a los problemas, no tiene excusas, porque en este corto periodo de su gestión recibió de la Nación recursos que nunca le fueron reconocidos a la ex Intendente Aida Ayala, como ser la devolución del 15 % del ANSES, los fondos del alumbrado público, $ 100 millones que le mando la Jefatura de Gabinete de la Nación, $ 33 millones de un préstamo de la Fiduciaria. Esto, además de los más de $ 1.200 millones que recibió de coparticipación y Fondo de la Soja que le mando la Nación y la Provincia en el 2016”.
“Lo que hoy resulta incomprensible es que, con toda esta cataratas de recursos frescos recibidos por parte de Capitanich, no se haya resuelto compromisos adeudados tan sensibles como los son las deudas justamente reclamadas por el Club Municipales”.
“Nadie niega las dificultades financieras por las que atravesó la comuna capitalina, pero también hay que entender que en 12 años de gestión nunca nadie, ni la Nación, ni la Provincia la auxiliaron financieramente a la gestión de Aida Ayala. Es más, en toda la gestión anterior, nunca se tuvo acceso a un crédito como para reprogramar los pasivos”, agrego Vilte.
“La negativa permanente de los Concejales justicialistas a cualquier tipo de asistencia financiera para Resistencia, obligo muchas veces a priorizar el pago de los sueldos a los empleados municipales y la prestación de los servicios básicos para la ciudad, lo cual lógicamente generaba un diferimiento en el cumplimiento de otras obligaciones como las transferencias al Club Municipales, el STM, entre otros”.
“El Intendente Jorge Capitanich conoce muy bien este tipo de cosas y nos extraña su actitud de falta de voluntad para dar respuestas a los compromisos heredados y en este caso especial a consolidar la deuda con el Club Municipales. Todo gobernante sabe que al asumir una gestión se encontrara con cosas que fueron resueltas, pero también habrá otras a las que en el transitar se le tendrán que dar una solución. Esto forma parte de la continuidad institucional que tiene todo Estado ya sea nacional, provincial o municipal, pero lo grave sería que Capitanich utilice la excusa de que esa deuda él no la genero por lo tanto no debería pagarle. Eso sería un argumento inconsistente para justificar su escasa o nula capacidad de solucionar esta situación”, finalizo el ex funcionario municipal Miguel Ángel Vilte.
