En el marco de una gira Latinoamericana y en el año del vigésimo aniversario del Complejo Cultural Guido Miranda se presentó la noche del jueves en sensacional concierto Harry Waters junto a Larry McNally en lo que fue un espectáculo de altísimo nivel musical e internacional.
El dúo conformado por el tecladista Harry Waters, hijo del líder de Pink Floyd Roger Waters, y el guitarrista y compositor Larry J. McNally, brindaron durante casi dos horas un magistral concierto cuya esencia partió del jazz pero que terminó acercándose más al rock, como el propio Waters lo reveló en entrevistas periodísticas.
Lo de Waters-McNally es difícil de encasillar. Interpretan canciones breves, “minimalistas”, según las define Harry. Ambos crean una atmósfera de guitarra y piano sonando al mismo volumen que se expande en una atractiva amalgama de folk americano, jazz neorleano, R&B y rock.
En la ocasión, el set de músicos de la banda se completó con el ex baterista de Divididos, Jorge Araujo y Federico Palmonella en bajo. Harry es hijo de Roger Waters y director musical de la banda del genio creativo y ex Pink Floyd. McNally es guitarrista y compositor de grandes hits de artistas como Rod Stewart, Joe Cocker, Chaka Khan, Bonnie Rait y The Egles.
De esta manera y ante una platea colmada se vivió una velada de alto vuelo musical en el complejo cultural Guido Miranda.
