El mayor fabricante de drones del mundo tiene un problema: el terrorismo. Los criminales del ISIS han aprendido a sacar provecho a los drones de DJI para soltar granadas y otros artefactos explosivos sobre soldados y civiles. ¿Cómo responde la compañía a esto? Con una actualización de software.
DJI (Da-Jiang Innovations Science and Technology) ha actualizado remotamente sus sistemas para crear grandes zonas de exclusión aérea sobre Siria e Irak, de manera que sus drones se nieguen a volar sobre ellas. No está claro si este movimiento responde a presiones del gobierno chino o estadounidense, o si bien es una jugada anticipada contra la mala prensa que supondría un futuro ataque de ISIS con drones de DJI, pero la compañía china tampoco está dispuesta a aclararlo.
En un comunicado DJI se limita a decir lo siguiente:
Fabricamos productos para fines puramente pacíficos, que es como la abrumadora mayoría de los pilotos los utilizan, y deploramos cualquier uso de nuestros drones para causar daño a nadie. Nuestro sistema de geovallas está diseñado para avisar a los pilotos de las restricciones del espacio aéreo, y nunca con la intención de hacer cumplir las leyes o frustrar a las personas que quieren hacer un mal uso de nuestros productos. Ciertas áreas vitales para la seguridad de la aviación o la seguridad nacional están marcadas como restringidas en nuestro sistema de geovallas y constantemente ajustamos esas áreas para tener en cuenta las condiciones temporales que crean restricciones especiales, como incendios forestales y eventos públicos importantes.
Este sistema de geovallas viene preinstalado en el software de los drones de DJI y restringe su vuelo en lugares como aeropuertos, cárceles y estadios. ¿Hasta qué punto puede ser útil activarlo en Siria e Irak para luchar contra los terroristas del ISIS? En el mejor de los casos, y a menos que consigan hackearlos, la táctica solo les disuadirá de atar bombas en un Phantom y en su lugar hacerlo en un dron de otra marca. La actualización ralentizará los avances de estos criminales, pero no será decisiva para ganar la guerra.
Al fin y al cabo, ISIS ya ha creado su propia unidad de “Vehículos aéreos no tripulados de los muyahidínes”. Solo en febrero, las bombas adheridas a estos drones mataron a 39 soldados iraquíes.
Fuente: Guizmodo [The Register]