El aberrante hecho ocurrió en la localidad de Curuzú Cuatiá. La carátula del caso es «supuesto abuso sexual agravado por acceso carnal y la situación de conviviente».
Según publica el diario Tal Cual, por pedido de la Policía correntina, se logró localizar y detener en una zona rural de Mocoretá -en el límite con Entre Ríos- a un joven de 20 años, sindicado como el autor de la violación de su hijastra, un niñita de 6 años. La carátula del aberrante caso es «supuesto abuso sexual agravado por acceso carnal y la situación de conviviente». La menor habría sufrido la violación a manos de quien sería el novio de su madre.
A raíz de este hecho, la Comisaría de la Mujer de Curuzú Cuatiá, emitió la solicitud de colaboración para la búsqueda de este joven que, según se informó oportunamente, podría encontrarse en la zona rural de Mocoretá.
En este sentido el Jefe del PRI de Mocoretá Comisario Inspector Ricardo Vallejos, inició una serie de investigaciones logrando dar con el paradero de un hombre de 20 años, de apellido Salinas, quien se encontraba trabajando en un establecimiento llamado “La nueva Providencia” como alambrador, distante a 15 kilómetros de la ciudad por Ruta 14.
Tras su detención, se comprobó que el joven está domiciliado en Cazadores Correntinos. En principio, el acusado fue trasladado al Hospital de Mocoretá donde fue revisado por el médico policial. Luego, fue llevado a Curuzú Cuatiá, donde se continúa tramitando la causa en la que estaría involucrado.
Ahora está detenida la madre de la niña
Una nena de 6 años habría sido víctima de una violación a manos de su padrastro en el interior de una vivienda de la pequeña localidad de Cazadores Correntinos, en el departamento de Curuzú Cuatiá, a unos 350 kilómetros al Sur de la capital provincial.
Por el caso la Policía detuvo a este hombre y ahora también lo hizo con la madre de la menor sospechada de encubrir el delito.
El hecho salió a la luz el miércoles a partir de la denuncia del padre biológico de la nena en la comisaría de la Mujer y el Menor de la ciudad de Curuzú Cuatiá.
En aquella dependencia de seguridad esta persona en estado de conmoción relató saber que la pequeña en cuestión sufrió un aberrante abuso sexual. En este sentido surgieron los nombres de la madre de la menor como de la actual pareja de esa mujer, identificado como Miguel David Salinas.
Los primeros procedimientos de las autoridades, con conocimiento del Juzgado y Fiscalía de Instrucción locales, fueron establecer la existencia del delito.
Estudios médicos preliminares serían contundentes. Habrían dejado en claro que la niña fue objeto de un supuesto “abuso sexual agravado con acceso carnal”.
La madre de la pequeña, bajo serias sospechas de tener conocimiento de lo que había ocurrido con su hija y ocultarlo, resultó demorada.
